Tres trabajadores de una correduría de seguros de Ourense han sido imputados por la Guardia Civil de Tráfico como presuntos autores de estafa continuada y apropiación indebida. Su implicación se deriva de la denuncia de un cliente. Tras sufrir un accidente, pidió la cobertura de los daños pero la correduría le comunicó que no tenía póliza en vigor. El particular intentó solucionar el problema, sin éxito, en la oficina y acabó denunciando ante la Guardia Civil. Presuntamente, la empresa cobraba a los clientes, en mano, el importe del seguro y después no se lo liquidaba a la compañía. Hay al menos cuatro afectados. Se investigan todos los posibles casos.