La sanidad pública ourensana sigue perdiendo medios materiales y humanos. La polémica por la desaparición de urgencias pediátricas del Complejo Hospitalario de Ourense, por la pérdida de uno de los tres especialistas que tenía el servicio, no es aislada y solo en los hospitales de la provincia se han perdido 50 médicos en el último año, en la mayoría de los casos por jubilación forzada por la propia administración "y cuyas plazas no van a ser repuestas", explica Emilio Armada, presidente de la Junta de Personal del Área Sanitaria de Ourense.

El máximo representante de los trabajadores en la sanidad pública en Ourense denuncia que la situación actual es fruto de una política de recortes "sin precedentes, que está afectando no solo al número y condiciones de trabajo y salariales de la clase médica, sino que el deterioro afecta también a las instalaciones sanitarias, con plantas como la quinta del CHUO que está igual que hace cuarenta años" afirma.

En estos momentos el número de facultativos en activo en la sanidad pública ourensana es de unos 600, en los hospitales de la ciudad y comarcas, y alrededor de 250 en los centros de atención primaria, afirma la junta de personal. Este sector "está sufriendo la pérdida paulatina de plazas por traslado o jubilación que no son cubiertas", advierte Emilio Armada.

Eso es precisamente lo que pasó con el discutido caso de Cirugía Pediátrica, donde un médico se jubiló por imposición de la administración sanitaria, que no admite prórrogas, se marchó otro cirujano "y el servicio se quedó sin la posibilidad de realizar guardias, ni siquiera localizadas", indica el presidente de la junta de personal.

"El malestar es generalizado, pues a muchos de los médicos a los que obligan a jubilarse antes incluso de cumplir los 65 años, les ha parecido injusto. Estaban dispuestos a seguir trabajando e incluso no asistieron al acto de despedida por el malestar con los modos que emplearon con ellos", advierte la junta de personal.

Al parecer entre ese medio centenar de jubilaciones de médicos hospitalarios "había algunos facultativos que estaban disfrutando de uno o dos años de prórroga, los llamaron durante sus vacaciones para que se incorporaran haciéndoles creer que hacían falta en el CHUO y solo fue para anunciarles que debían jubilarse sin admitirles el acuerdo de prórroga", denuncia el representante sindical.

El ahorro y los recortes están tomando el modelo de la Comunidad de Madrid, donde, según el vicepresidente del CESM, no es posible siquiera evaluar los costes de la privatización "porque están en los tribunales". No va pareja a la situación laboral de los facultativos, pues "los médicos gallegos son los peor reconocidos de Europa a pesar de lo que dice nuestra conselleira que insiste en que estamos muy bien pagados", criticaron.

A la reducción de plantilla para atender una población cada vez más envejecida (Ourense es una de las provincias con mayor índice de jubilados y pensionistas de España y por tanto de pacientes con patologías crónicas) se suma la "precarización" de las condiciones laborales.

Así, al menos 70 médicos contratados en el CHUO , es decir en los hospitales de Ourense, O Barco o Verín, tienen contratos de "tres meses e incluso de un mes, con lo cual es imposible conseguir una fidelización de esos profesionales con el hospital en el que están trabajando y del que saben que se tienen que ir en poco tiempo, ni que lleguen a conocer bien a sus pacientes", explica Emilio Armada.

Las jubilaciones forzadas son además, según la CESM, un ataque directo a la medicina, cuyos profesionales "después de la duración de los estudios, nos incorporamos al mercado laboral con 30 años, tras una dura oposición, y ahora nuestro trabajo acaba forzosamente a los 65 años, cuando se está hablando de aumentar a los 40 años el tiempo cotizado para la jubilación", explica la junta de personal.

La Plataforma en Defensa da Sanidade Pública -SOS Sanidade Pública- lamenta la "ceremonia de confusión" que está llevando a cabo estos días el Sergas en cuanto al futuro del servicio de urgencias de Cirugía Pediátrica del CHUO, inexistente desde el verano por jubilación de un especialista y traslado de otro. Afirma que continuará con su campaña de recogida de firmas, pues no hay compromiso alguno de la Consellería ni del CHUO, de que ese servicio de urgencias se vaya a mantener.

Las noticias vertidas por la gerencia de forma no oficial diciendo que ya había una solución para operar con ayuda de cirujanos y urólogos generalistas determinadas patologías de niños en edad pediátrica "no tiene sustento alguno", afirma la plataforma, pues es un protocolo que no se les dio a conocer. Por ello seguirán adelante con su campaña de recogida de firmas y mantendrán además una asamblea abierta el próximo 30 de octubre en el salón de actos del edificio sindical del Parque de San Lázaro, a partir de las 19.30 horas con las asociaciones de padres y madres de alumnos de la provincia.

"Entendemos que el problema creado por la gerencia de Ourense, al negarse a cubrir las bajas de los dos cirujanos pediátrico que existían en el CHUO, se le ha ido de las manos, pues la respuesta de diferentes colectivos, organizaciones y entidades provinciales ha sido contundente", afirma la plataforma, "y hasta el PP en la Diputación se sumó a la propuesta".

Creen que las información que vierte extraoficialmente la gerencia "son un intento de maniobrar para reducir el coste político y social de una medida que desde posiciones burocráticas se pueden entender, pero indican su clara desconexión con las necesidades asistenciales de la provincia", afirman desde la plataforma.