No temen a las 8 horas de trabajo diario que deberán cumplir durante todo un mes a bordo del Vizconde de Eza, aunque sí al mareo, por lo que embarcarán bien pertrechadas de biodramina por si el molesto compañero de viaje apareciese. Es su primera campaña oceanográfica y estas 4 estudiantes de Ciencias del Mar quieren demostrarse a sí mismas que están preparadas para iniciar una carrera investigadora en este ámbito.

Tras superar un proceso de selección entre sus compañeros de facultad, participarán en 2 de las 3 campañas anuales que el IEO desarrolla en el caladero del Atlántico Norte para determinar la biomasa y abundancia de especies comerciales como el fletán negro y el bacalao. En la intermedia serán los estudiantes de Santiago los que se incorporen a la tripulación científica.

Diana Casado y Gabriela Hernández serán las primeras en vivir esta experiencia. El próximo día 24 partirán desde Vigo a bordo del Vizconde de Eza hacia el Gran Banco de Terranova para colaborar hasta el 24 de junio en la campaña Platuxa que dirige la investigadora del Oceanográfico de cabo Estai Elena Guijarro.

"Ya hemos tenido la primera reunión con ella y es muy maja. Acabo de terminar la carrera y me gustaría ser investigadora, así que voy a aprender de los científicos y podré ganar experiencia y currículo", comenta Diana, una segoviana que alternó sus estudios en Vigo con un año como "erasmus" en Portugal.

Ya sabe qué libros meterá en su maleta -China para hipocondríacos y El retrato de Dorian Grey- y bromea sobre el hecho de que las 4 seleccionadas de este año sean chicas. "Ellos no se atreven", dice entre risas.

Su compañera de viaje, Gabriela, es estudiante de grado -las otras tres cursaron la licenciatura- y recogerá su diploma oficial tan solo unas horas antes del embarque. "Estoy preparando las dos cosas al mismo tiempo, está siendo un poco desquiciante", comenta entre risas.

Aunque nació en Venezuela, reside desde los 10 años en Vilagarcía: "Antes vivía delante del Caribe y ahora en la Ría de Arousa. Siempre he tenido fijación por el mar y esta experiencia me puede ayudar a inclinarme por una rama concreta. Durante la carrera los profesores siempre nos hablaron de diferentes campañas y ésta es una oportunidad para saber si eres capaz de vivir esa vida. Vamos a trabajar pero también a aprender un montón".

La presencia de estudiantes en las campañas del IEO es continua desde 2008 y Gabriela asegura que sus predecesores fueron "muy bien acogidos y aconsejados" por los investigadores. "Seguro que no habrá problemas, están muy acostumbrados. La idea es empaparme de sus conocimientos", comenta Victoria Pérez, que viajará en avión a Canadá junto con Marta Sixto para incorporarse a finales de julio a la tercera campaña del IEO, Fletán Negro 3L, liderada por Esther Román.

Victoria, natural de Alicante, ya probó suerte el año pasado para disfrutar de esta "oportunidad increíble". "Me gustaría dedicarme a esto, pero hasta que no estás en un barco no sabes si se cumplirán tus expectativas. El profesor Javier Hernández siempre nos hablaba de sus campañas y a mí me metió el gusanillo", comenta desde el Centro de Investigación Marina de Oporto, donde realiza unas prácticas "erasmus"..

A pesar de los recortes, ella no está dispuesta a renunciar a su vocación: "No tienes que perder la ilusión ni dejar de esforzarte en intentarlo. Nuestra carrera lo tiene más complicado en este momento, pero no me importaría marcharme a otro país y espero que el Campus del Mar cree más oportunidades".

También para Marta, que colaboró con un laboratorio de cefalópodos durante un año de "erasmus" en Brasil, ha sido su segundo intento para embarcar en un oceanográfico: "Estoy supercontenta, acabo este año y es un regalo al final del camino. Me irá muy bien para decidir si me dedico a la investigación. Durante la carrera, después de hacer las prácticas en barco volvía a casa supermotivada. Mi mayor miedo es verme en la inmensidad del océano", confiesa.

Ambas trabajarán en la zona de Flemish Pass evaluando el stock además de recoger datos oceanográficos. Marta es de Manresa y eligió para estudiar "la mejor tierra, aunque llueva un poco de más". Ya se ha probado la ropa de trabajo y el traje de aguas que utilizará a bordo, aunque su compañera asegura que ellas navegarán en la mejor época meteorológica. De cualquier forma, será "una oportunidad de lujo", resume Marta.