El Servicio Galego de Saúde anunció ayer las medidas prevista de reducción de camas hospitalarias en Galicia para este verano, que será en Ourense, del 87% del total. Esto supone que de las 1.008 camas operativas en los hospitales del Área Integrada decir Ourense, Verín y O Barco, quedarían funcionado con normalidad 874 camas.

El Servizo Galego de Saúde mantendrá durante la época estival operativas el 87,26 por ciento de las camas disponibles en los centros hospitalarios de la red pública gallega.

Según informa el Sergas, la decisión sobre el alcance de esta programación se toma teniendo en cuenta la responsabilidad principal de la sanidad pública gallega de garantizar la seguridad y la calidad asistencial de los pacientes, por lo que, indica que "de ser necesarias", las camas "podrían activarse en cualquier momento", al tiempo que "permite gestionar de forma eficiente las vacaciones reglamentarias de los profesionales para la disminución de demanda-.

El Sergas subraya que realiza la actuación siguiendo su política "de eficiencia" y la gestión de los recursos. Así, que desarrolla una "planificación en base a una política de reestructuración de unidades de hospitalización".