Manuel R.G., un vecino de Cea de 83 años, volvía a las tres y media de la tarde de tomar café. Un pastor alemán, el mismo perro que en otras ocasiones no le había hecho nada, se abalanzó sobre él, lo arrojó al suelo arrinconándolo contra un reborde de piedra y lo mordió en la orejas y en las piernas. "Só foron feridas superficiais", decía ya en casa tras recibir el alta un Manuel con tono conciliador. Pero el octogenario, a medicación con anticoagulantes, sangró tan abundantemente que la intervención de unos vecinos resultó crucial para contener la hemorragia. Mientras esperaban la llegada del helicóptero, dos personas de una casa próxima le practicaron torniquetes con unas toallas y un cinturón. Manuel fue evacuado al Complexo Hospitalario de Ourense (CHOU) y, tras ser sometido a pruebas médicas urgentes, recibió el alta. Renunció expresamente a presentar denuncia.

El aparato, movilizado porque no había en las proximidades disponible una ambulancia medicalizada, llegó en tiempo récord y tomó tierra en el campo de fútbol de O Lodairo, a pocos metros de donde se originó el ataque. Ruidoso según algunos vecinos, agresivo a veces con algunos transeúntes como los peregrinos que atraviesan la localidad, dicen otros; el animal vive encerrado en una vivienda sin acabar de la zona.

La dueña pide el anonimato pero recuerda como se desencadenaron los hechos súbitamente ."Iba a darle de comer y a sacarlo luego de paseo. Abrí la persiana, salió corriendo y le saltó encima. Lo llamé y le grité pero no me hizo caso", explica. Manuel, que también suele pasear con su perro por la localidad, fue ayer la diana.

El animal, que tras el ataque volvió al interior de la casa, clavó sus dientes en la oreja del mayor y le mordió en las piernas. Una de las personas que asistió en su ayuda y que tiene el lugar del ataque frente a su ventana, relata que sucedió después de oír los gritos de la propietaria del perro desde su casa. La vecina y un familiar trataron de bloquear la pérdida de sangre haciendo un torniquete. Los efectivos médicos desplazados al lugar en helicóptero se llevaron al herido. El octogenario recibió el alta, después de que le realizaran unas placas y le curaran las heridas aplicandóle puntos de sutura.