La reunión entre el concejal de Limpieza, Antonio Rodríguez Penín, y los miembros del comité de empresa de Ecourense no supuso ayer ningún avance en la solución del conflicto laboral en el servicio municipal de limpieza urbana, con una convocatoria de huelga indefinida fijada para el día 28 por el despido de una trabajadora. Sin embargo, el encuentro reveló a los representantes sindicales la existencia de un informe jurídico del Concello de Ourense que considera nulo el acto administrativo del despido de la empleada, aunque la decisión final estará en función del expediente sancionador que el área de Limpieza requirió en su momento al gerente de la empresa, Juan Pérez.

Los representantes sindicales reconocían al término de la reunión que "esperábamos algo concreto", al considerar que el gobierno bipartito tuvo tiempo suficiente para "actuar" desde que se produjo el despido y las denuncias por la actitud del gerente de la empresa. Aluden al pliego de condiciones técnicas de la concesión, donde se establece que "la empresa está tutelada por el Concello, que es quien le paga, por tratarse de un servicio público que cuesta mucho dinero", en concreto más de 9,1 millones de euros al año.

La situación "preocupa" al alcalde, Francisco Rodríguez, "por tratarse de un servicio importante para los ciudadanos". El regidor ourensano dejó patente, además, su "disposición a intermediar en el conflicto", del que, sin embargo, se desmarcó de inmediato al asegurar que se trata de "un problema entre empresa y trabajadores".

La afirmación de Rodríguez creó "desanimo e indignación" entre los miembros del comité de empresa, como aseguró el secretario de la CIG, Etelvino Blanco, mientras que otros representantes sindicales fueron más explícitos al referirse a la postura del alcalde, que "parece que con él no va el tema". Le recordaron que la empresa cobra dinero público, con el agravante de que el conflicto se produce por "no respetar un derecho constitucional", sin que el gobierno bipartito intervenga, con lo hay "una dejadez de funciones clarísima", señalaron.

Rodríguez, ajeno a estas y otras críticas, recordó que "debemos garantizar que la prestación del servicio se haga en las mejores condiciones, como es nuestra obligación". De ahí que hiciese un llamamiento a la empresa y los sindicatos para que "sean capaces de poner toda la voluntad del mundo, por ambas partes, para resolver el conflicto y evitar que se produzca la huelga".

Siguiendo está línea argumental, y evitando en todo momento entrar en los motivos que llevaron a los trabajadores a convocar el paro, el alcalde subrayó que "la decisión perjudica ese derecho que tienen los ciudadanos a que se preste ese servicio con todas las condiciones que nos demandan".

Reunión alcalde y empresa

Las declaraciones de Francisco Rodríguez, lejos de rebajar la tensión, provocaron las criticas de los representantes sindicales, que además de reprocharle que no atendiese la petición de reunión urgente solicitada para abordar el conflicto, incumple las promesas, como fue la de "mantenernos informados de las gestiones que se hagan", indicaron, en referencia directa al encuentro que Rodríguez mantuvo el lunes con miembros del comité de dirección de la UTE adjudicataria del servicio municipal de limpieza urbana, Copasa-FF.CC.

Como adelantó FARO en su edición de ayer en este encuentro se habría abordado la situación en la que se encuentra el servicio y las consecuencias que puede traer consigo la huelga indefinida convocada por los trabajadores.