El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, y la conselleira de Política Territorial, María José Caride, presidieron ayer el acto de colocación de la primera piedra del futuro acceso a O Carballiño de la AG-53 -la autopista Dozón-Ourense-, un acceso de más de 7 kilómetros de trazado, que incluye un enlace a Maside y que cuenta con un presupuesto de 40 millones de euros. La obra estará rematada según las previsiones entre octubre y noviembre de 2009.
Es el inicio "de un Ourense libre de peaje", indicó Pérez Touriño bajo la carpa institucional ubicada a pie de obra en un acto en el que estuvo acompañado por los alcaldes de Maside y O Carballiño, el director xeral de Infraestructuras, simpatizantes y militantes que jalearon el levantamiento de pala del presidente para poner la piedra inaugural.
La obra iniciada ayer cierra el itinerario de comunicaciones de O Carballiño y Maside con Ourense, con Lalín y Santiago a través de una red de vías de altas prestaciones. El vial de acceso será de uso gratuito a lo largo de sus 5,2 kilómetros y con características de autovía, incorporando dos carriles por cada sentido de circulación y dos enlaces, el de la AG-53 y el de Maside, éste último situado aproximadamente en la mitad del recorrido. Tendrá además cinco pasos superiores y tres inferiores.
Para poner en marcha este proyecto, la Consellería de Política Territorial reconvirtió el diseño original y dotó un enlace a Maside cuando el acceso estaba concebido inicialmente como semienlace.
La conselleira de Política Territorial, María José Caride, destacó que "hemos realizado más kilómetros libres de peaje desde que llegamos al gobierno de la Xunta que todo lo que se hizo en la historia de Galicia".
Pérez Touriño puntualizó al respecto que habían recibido "una hipoteca" del anterior Ejecutivo en la autopista Santiago-Dozón y que esa hipoteca"se levantó al convertirla en autovía libre de peaje desde el Alto de Santo Domingo hasta Ourense".
Añadió que cuando llegó al Gobierno "tan sólo existían 27 kilómetros libres de peaje, mientras que sólo desde Dozón hasta la A-52 se construirán 31 kilómetros libres de peaje, sin contar con este acceso a O Carballiño", explicó. Añadió que este año estarán rematados 80 kilómetros con estas características, es decir de uso gratuito para el conductor, y el objetivo es superar los 460 libres de peaje cuando remate el mandato, "lo que multiplicará por 17 los kilómetros existentes cuando llegamos al Ejecutivo autonómico", señaló Touriño.
El presidente de la Xunta indicó también que la Administración autonómica presentó hace un mes el Plan de Estradas de Galicia, que prevé una inversión de 16.000 millones de euros hasta el año 2012 y que va a suponer la transformación de las tres cuartas partes de la red de infraestructuras de Galicia.
