Fuerza policiales de O Carballiño alertan sobre la oleada de robos de los últimos 15 días en la localidad. Se registraron tres, todos ellos en pisos, y sin que hubiera ninguna persona en la vivienda y el botín en su mayoría fue de joyas. Por este motivo, tanto la Guardia Civil como la Policía Local están colaborando conjuntamente en la investigación de los hechos.

Así, el primero de los robos ocurrió hace quince días en la calle Tomás Mosquera concretamente en el edificio Magariños. En este caso, según fuentes próximas a la investigación, los ladrones utilizaron una "pata de cabra" -una especie de palanca- para abrir la puerta, que quedó totalmente destrozada y revolvieron toda la vivienda. Los dueños del piso, precisamente tienen su negocio en las galerías que están al lado y que llevan el nombre del edificio, no se percataron hasta que llegaron por la noche.

El segundo de los robos ocurrió hace tres días, en este caso en el edificio Cheda en la calle Aldara. Aquí los ladrones entraron en el domicilio sin forzar la puerta y lo curioso fue que se llevaron joyas valoradas en unos 4.000 euros pero que se encontraban guardadas en un cofre en el fondo del congelador de la cocina.

El tercer caso y el más reciente sucedió el pasado jueves entorno a las 18.00 horas. Al parecer según explica el dueño del piso, "salimos de casa sobre las tres de la tarde yo para ir a trabajar y mi compañera a dar una vuelta y cuando ella volvía con una prima se encontraron con todo el piso revuelto, y el caso es que antes de entrar se encontraron con dos chicos jóvenes en el pasillo, por lo que sospechamos que alguien que estaba abajo los avisó".

En este caso, el botín en joyas fue de unos 2.000 euros. Había alhajas de plata y de oro, pero lo más preciado eran las dos alianzas que habían comprado para la celebración de su enlace matrimonial, que será dentro de dos meses. Además, también se llevaron de la sala, según un familiar de la pareja "la televisión de plasma, el DVD y la PSP del niño".

Fuentes cercanas a la investigación afirman que "no hay que crear alarma en la localidad, porque pueden ser casos aislados", además de incidir en que "todo apunta a que las víctimas fueron elegidas al azar", aunque si recomiendan que se tomen precauciones como cerrar bien las puertas.

En estos momentos las investigaciones en los dos primeros casos están muy avanzadas.