Xa non estamos na época dos heroes ou viláns, mais para un marciano que buscara en Google, Galicia seguiría sendo aínda máis un país de poetas e artistas ca de empresarios". El catedrático de la Universidad de Santiago Xoán Carmona se refiere así en la presentación del libro "Empresarios de Galicia" que acaba de publicar la Fundación Caixa Galicia con las biografías de 24 empresarios de Galicia, ya fallecidos. Entre ellos figura Gaspar Massó García (Bueu, 1892-Vigo, 1991). Su biografía fue elaborada por Luisa Muñoz Abeledo, profesora de la Universidad de Santiago, y en ella se alude a los orígenes de los Massó, en Blanes, y como eran ejemplo de la diáspora mercantil catalana.

Los Massó instalan la compañía familiar de salazón en 1816 en Bueu y en 1883 realizan la transición a la conserva hermética de pescado. Lo realizó el abuelo de Gaspar Massó, Salvador Massó Palau, animado por sus dos hijos varones, Gaspar y Salvador Massó Ferrer, y se puso en contacto con el empresario francés Pascual Dargenton Lafont para fundar una sociedad de capital mixto, La perfección. La empresa se disolvió en 1898 y se convirtió en regular colectiva con el capital de los socios fundadores Gaspar y Salvador. Se dedicó a la producción de conserva, salazón de pescado, compra y venta de harina, redes y fabricación de artefactos de pesca. Antes de la Guerra Civil sólo cuatro conserveras eran Sociedad Anónima y una de ellas fue la de Massó, que se transformó en 1930, manteniendo sistemas de financiación y sucesión internos durante el primer tercio del siglo XX. La empresa fue dirigida por los hermanos Gaspar y Salvador. Las ganancias durante la Guerra Civil fueron invertidas en nuevas fábricas, de transformación de pescado en Bueu, un taller de manufactura de latas y la construcción de diferentes embarcaciones de vapor con tecnología anglosajona: Massó 5 (1916), Massó 6 (1918), Independiente, el Nuevo Silvestre y Colón, construida en 1920. Hay que añadir, según consta en la biografía de la profesora santiaguesa, una lancha motora, construida en 1925, y el Blanes, en 1927, que fue el primer sardinero de motor de la región.

La empresa comercializó sus múltiples marcas (Massó, Kairel, El Porrón, Gaviota, Massó Grand) de diferentes calidades, en el mercado externo. América, Estados Unidos, Argentina y Chile estaban entre sus principales clientes, y también vende en Europa, sobre todo en Francia. La buena marcha de los negocios, hizo que la familia Massó invirtiera también en otros negocios como en Tranvías Eléctricos de Vigo y de Pontevedra; Molinera Gallega, acciones en el Banco de Vigo y en la Compañía General de Carbones de Barcelona. En los años veinte se incorpora la nueva generación, sobre todo los hijos de Gaspar Massó. Gaspar era el primogénito.

La trayectoria de 24 hombres

El libro de la Fundación Caixa Galicia recoge en 533 páginas, las biografías de 24 empresarios gallegos, que fueron elaboradas por un abanico de 21 autores, profesores de las tres universidades gallegas, entre los que se encuentra el propio coordinador del libro, Xoán Carmona, o Xosé Ramón Barreiro, presidente de la Real Academia Galega. En la relación de biografiados están: Antonio Raimundo Ibáñez, marqués de Sargadelos; Manuel de la Riba, José Pastor, Juan Harguindey Broussain, Pedro Muria, Olimpio Pérez, Meltón Domínguez, Enrique Peinador, José María Rivera Corral, Dionisio Tejero, Marcelino Suárez, José Barreras Massó, José Ramón Curbera, José Barro, Evaristo Castromil, Antonio Valcarce, Pedro Barrié de la Maza, José Fernández, Manuel García Cambón, José Rodríguez, Ricardo Bescansa y Eulogio Gómez Franqueira.