"Agradecida a todos los compañeros, porque me he sentido muy querida y respetada, y he aprendido muchísimo". Así se confiesa Macu Rodríguez tras haber presentado la renuncia a su acta como edil en Bueu tras cuatro años en la corporación, en los que tiene un especial recuerdo para el regidor, Félix Juncal.
- ¿Cuáles han sido las razones para esta dimisión?
- Fundamentalmente de tipo personal, y vienen dadas por una serie de acontecimientos, algunos de ellos cuestiones de salud. Tengo pendiente una operación, no es nada grave, pero necesito parar, resetear y repensar mi vida.
- ¿Le ha costado tomar esta decisión o ha sido algo que ya venía valorando?
- En realidad viene desencadenada por estas circunstancias, aunque es cierto que ha sido un año complicado en lo personal.
- ¿Ha influido la pandemia y ese confinamiento que ha dejado tiempo para reflexionar?
- Tal vez sí, aunque yo no he tenido mucho tiempo para reflexionar, porque ha sido un periodo terriblemente estresante. Han coincidido unas circunstancias laborales complicadas, porque para el profesorado ha sido una época de mucha tensión, y en el concello la hemos vivida también con una enorme intensidad. Cuando acabé el curso estaba en un completo agotamiento mental y físico.
- Ha llevado áreas como Infancia, Mocidade y Benestar Social, tan agradecidas como duras en tiempos de coronavirus.
- Aún más duras, cierto. En Benestar Social el teléfono no paraba de sonar todos los días, con el personal agotado porque no daba abasto. Ha sido una época muy dura, con familias que nunca habían pedido ayuda y otras que volvían tras haber remontado la crisis de 2008. Fueron situaciones muy duras y de urgencia. El confinamiento fue agotador.
- Hizo de la lucha por la diversidad una de las banderas de su concejalía.
- Sí, porque me parece que queda mucho trabajo por hacer. La tendencia de la sociedad actual a la homogeneización es aplastante y todos somos diferentes. No podemos dar la espalda a esa invisibilidad de la diversidad afectivo-sexual, pero tampoco de la intelectual o la física. Tenemos que conseguir que cada persona tenga su espacio. Para poder educar lo primero que hay que hacer es apoyar.
- ¿Ha habido en este tiempo algún proyecto que haya sido especial para usted?
- Posiblemente este de la diversidad, y pido a mis compañeros que sigan luchando por él. Mi ilusión hubiese sido que, igual que hay un Plan de Igualdade en el concello, haber redactado un Plan de Diversidade donde todo el mundo se sintiese incluido.
- En el debe quizás el Reglamento de Voluntariado sea la espina que le queda clavada.
- Sí, porque fue el primer gran proyecto que inicié. Contaba con el respaldo de todo el tejido social, pero por dificultades burocráticas no ha podido ver la luz. Pero creo que hay que seguir luchando por conseguirlo.
- ¿Esto es un punto y final a su carrera política o se trata solo de un hasta luego?
-Siempre he tenido conciencia política y seguiré teniéndola. ¿Estar en primera línea? No lo sé. En este momento necesito un parón y no sé hasta cuándo será.
