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Velloso saca su Cristo en procesión

El artista quiso cubrir el vacío de que este año no hubiera procesión y bajó el cuadro por la rúa Real desde la excolegiata

Velloso, en su exposición "El color lo cura todo", en Cangas.

No hay recuerdos en Cangas, por lo menos en el entorno de las cofradías, de cuándo por otras causas que no fueran la lluvia, no se pudo celebrar la procesión del Cristo. Este pasado domingo y debido a la pandemia del coronavirus, no hubo la multitudinaria procesión.

Pero por la calle Real salió ayer por la mañana un peculiar Cristo, el cuadro "Procesión del Cristo de Cangas" de Raúl Velloso, fiel a su estilo en el que el color es protagonista así como las formas curvilíneas, que el mismo artista trasladó desde la puerta de la excolegiata por la calle Real abajo. Eso sí, sin los pasos de la banda ni los fieles con sus velas, en total soledad, pero con el Cristo por dónde tenía que haber bajado si no fuera porque el Covid-19 no lo ha permitido como un soplo de Satanás.

Velloso saca su Cristo en procesión

Velloso saca su Cristo en procesión

Velloso asegura que buscó en las redes sociales otra fecha, a lo largo de la historia, en la que no se hubiera podido celebrar la procesión y no la encontró. Por eso que decidió coger su "Cristo", pintado hace unos 20 años y que formaba parte de la exposición "El color lo cura todo" que estuvo abierta todo agosto en un local de la calle Real, y lo bajó en procesión.

Aunque sin fieles, no pasó inadvertido. A las diez de la mañana se rezaba el rosario en la excolegiata y quienes estaban fuera se toparon con el "Cristo" de Velloso que él defiende como arte sacro y del que dice que no tiene qué molestar porque es una visión moderna del Cristo. pero lo cierto es que el capellán salió a preguntar y el Cristo y Velloso emprendieron su peculiar procesión por la calle Real: "Fue hecho con total respeto y devoción", añade el artista.

De formación autodidacta, Raúl Velloso descubre su vocación artística en los años 90 cuando residía en Barcelona, en donde conoce al pintor Antoni Tàpies (Barcelona, 1923-2012). El reconocido artista le dio consejos sabios y útiles y lo apadrinó. Durante años le enseñó en su casa las técnicas de los pigmentos, las texturas y el color. Velloso fue el único artista que pintó en su estudio y trabajó con él durante años. La influencia de Gaudí, la arquitectura de la ciudad Condal y su formación con el maestro Tàpies marcaron sus comienzos y su trayectoria que perdura y sigue creciendo a lo largo del tiempo.

Tras su etapa en Barcelona, Velloso regresa a Galicia natal e instala su estudio en Cangas. Experimenta con el costumbrismo gallego, la arquitectura de su tierra y los faros que no puede dejar de plasmar, siempre fiel a su estilo,.

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