Los problemas que sufren los vecinos de Moaña en materia de asistencia sanitaria desde el inicio de la pandemia de Covid-19 todavía colean. El colectivo de usuarios Plataforma en Defensa da Sanidade adelanta que planteará nuevas movilizaciones para exigir el retorno de la asistencia presencial y que la villa recupere el servicio de Urgencias desplazado a Cangas en primavera. El malestar vecinal ha provocado que en las últimas semanas algunos usuarios acaben pagando su enfado con el personal sanitario de la Casa do Mar, tanto con los médicos como, sobre todo, con el Personal de Servizos Xerais (PSX), que se encarga de atender en la entrada a los que llegan al centro de salud. Ellos sufren los cabreos de algunos usuarios e incluso insultos tanto presenciales como a través de las redes sociales. En este sentido, la alcaldesa, Leticia Santos, realizó ayer un llamamiento "a las personas que están pagando con el personal sanitario su enfado por la situación de la sanidad pública". La regidora les pide que "canalicen el malestar contra el presidente de la Xunta, como máximo responsable del gobierno gallego", aludiendo así a que la organización sanitaria corresponde a la Administración.

Insiste, Santos, que las personas responsables de "la situación de la sanidad pública en Moaña" tienen "nombres y apellidos" y carga directamente contra el presidente gallego y contra el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña.

Así, la máxima responsable del gobierno municipal bipartito pide, también a través de un post en Facebook, que "empaticemos con las personas que están haciendo lo posible por mantener el sistema sanitario de este país en pie y por mantenernos a salvo a pesar de su, cada vez más precarizada, situación laboral". La mandataria agradece públicamente la labor de todo el personal sanitario y socio-sanitario "por ser lo mejor del sistema sanitario público", apunta.

La publicación se ha viralizado en pocos minutos con decenas de comentarios. La inmensa mayoría de ellos defienden que no puede ser el personal el que pague los platos rotos de esta situación que ya llevó a una petición a la Xunta con el respaldo de todos los grupos de la Corporación y que sacó a la calle a cerca de 2.000 personas a comienzos del mes de agosto.

A la exigencia de una atención presencial y de recuperar las urgencias se suman este mes las quejas por el retraso en la concesión de citas para la atención primaria debido a que parte del personal está de vacaciones y no se cubre su ausencia, un problema que se repite verano tras verano desde hace años. Algunos usuarios hablan de esperas de hasta 15 días.

Sobre la atención presencial, el personal sanitario alegó en los últimos días que la decisión parte de la necesidad de no convertir el centro de salud "en un foco de contagios" ante el riesgo que implica la situación de pandemia.

La Plataforma en Defensa da Sanidade convocó para esta tarde una reunión de urgencia al no haber recibido ninguna respuesta de la Xunta tras sus protestas. No descartan organizar nuevas movilizaciones con las mismas exigencias. Desde la Gerencia del área de Vigo señalaron este mismo mes que lo más seguro sigue siendo mantener las urgencias en Cangas con dos circuitos diferenciados.

Desde la Plataforma, por su parte, calculan que el 80% de las citas de atención primaria de Moaña se están atendiendo vía telefónica "cuando en otros la atención por teléfono se limita a un 20%", critican. Entienden las órdenes del Sergas, pero alegan que "es decisión de cada médico si decide atender presencialmente a un paciente o no".