El alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos, fue informado del suceso de inmediato por los responsables policiales, que habían puesto en marcha la "operación jaula" para evitar que se fugaran del municipio los implicados en el apuñalamiento. Poco después, felicitaba a los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad por la rápida detención, en el entorno de Pedra Alta, de los tres menores supuestamente relacionados con el suceso, que fueron trasladados al cuartel de la Guardia Civil a la espera de su puesta a disposición judicial.

"Debe quedar claro que Cangas no es lugar de pandillas violentas y esta detención debe tener un efecto disuasorio" para quien pueda pretender lo contrario, avisa el regidor, que abunda en que la Policía Local y la Guardia Civil no tiene constancia de grupos juveniles organizados de este tipo en el municipio, por lo que podrían proceder de Vigo o de otras localidades del entorno. Confía en el trabajo policial para evitar este tipo de enfrentamientos y en que la justicia "actúe con contundencia" si se producen, como en el caso de ayer.

Aunque oficialmente no hay constancia de amenazas o enfrentamientos entre pandilleros organizados más allá del "simple gamberrismo", los cuerpos y fuerzas de seguridad investigan posibles desplazamientos de menores con intenciones violentas que puedan perturbar la libre y pacífica convivencia.