Los bateeiros de Bueu pueden volver a trabajar. El Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) ha autorizado la apertura de uno de los polígonos mejilloneros de la localidad, el Bueu A1, que suma más de medio centenar de bateas. El sector esperaba la noticia desde hace días puesto que las analíticas estaban en el límite que permitía la vuelta a la actividad. De hecho el cierre tenía la consideración de cautelar.

Curiosamente esta vez el cierre no estaba provocado por la presencia de toxinas lipofílicas, sino por un episodio de paralizante. El sector confía en que durante los próximos días las analíticas mantengan la tendencia y se puedan abrir los otros dos parques bateeiros de la localidad. También se mantienen cerrados los polígonos situados en la ría de Aldán. A estas alturas del año la producción que se extrae de las bateas de Bueu se destinará fundamentalmente al mercado de fresco y para abastecer al canal de la hostelería.

El ejercicio 2020 está siendo especialmente complicado para el sector bateeiro de la localidad. El afloramiento de primavera se adelantó varias semanas y provocó el primer cierre a principios de febrero, más de un mes antes de lo que sería habitual. Posteriormente hubo una breve reapertura en Semana Santa, algo inédito en los últimos años, pero coincidió con el confinamiento provocado por la pandemia de la covid-19.