La posibilidad de rebrotes de Covid-19 está avalada por los que ya se han producido en varias zonas geográficas y el sistema sanitario de Cangas y O Morrazo no está adecuadamente preparado para darle respuesta, con centros de salud cerrados o mal dotados de personal y medios materiales y unas autoridades que hacen oídos sordos a las necesidades y demandas de la población. Así lo plantea el colectivo A Voz da Sanidade, con el aval del gobierno cangués, que exigen a la Consellería que tome nota de lo aprendido durante el confinamiento, recupere los servicios suspendidos -atención presencial de pacientes, reapertura del consultorio de O Hío-, refuerce los que son insuficientes -radiografías también por las tardes- y replantee las necesidades sobre un centro de especialidades (CAR o CIS, según los modelos) porque el plan funcional para O Morrazo presentado por la Xunta y elaborado por la consultora Gesmédica se queda corto.

A Voz da Sanidade considera que la "nueva normalidad" no se aplica con criterios coherentes en la atención primaria, donde se siguen dando las citas por teléfono y la posibilidad de consulta presencial queda a criterio médico, sin consensuarlo con los usuarios. Critica que los pacientes quedan desprotegidos y excluidos y el Sergas no da respuesta a esa necesidad. Como tampoco a las colas que se producen en el exterior del PAC (Punto de Atención Continuada) de Cangas a la espera de un análisis o una radiografía. El colectivo entiende que se debe regular el flujo de gente, pero no a cuenta de que los usuarios se queden expuestos al calor o a la lluvia, y aboga por crear n circuito interno y habilitar plazas suficientes para los 46.000 usuarios potenciales, sumando Cangas y Moaña.

Otras carencias detectadas por A Voz da Sanidade y que insta a los usuarios a denunciar para hacer presión ante la Xunta es la carencia del servicio de radiología por las tardes, de un ascensor que permanece inactivo desde hace años a pesar de la escasa inversión necesaria y que el Concello se presta a asumir, la dotación de pediatra en Aldán y el refuerzo de del servicio en Cangas por las tardes, así como de más profesionales en el servicio de salud mental, pues solo hay un psicólogo y una psiquiatra para atender a los pacientes de Cangas y Moaña. Unas carencias que consideran "de escándalo". La construcción de un centro de salud para O Hío-Aldán, que además evitaría tantos desplazamientos y la propagación de virus, así como el refuerzo del servicio de ambulancias al menos en temporada estival son otras demandas que se repiten y no ven atendidas.

Las quejas son compartidas desde el Concello de Cangas, como recalcó la concejala de Servizos Sociais, Victoria Portas, en una comparecencia conjunta. Señala que el cierre temporal del consultorio de O Hío y el traslado del servicio a Aldán perjudica a muchos usuarios que carecen de transporte público de conexión y a los que les resultaría más cómodo desplazarse al centro urbano, aunque el Sergas no le ofrece esa opción, critica la edil, pues considera que ha pasado tiempo suficiente desde que se levantó el estado de alarma para recuperar la normalidad.

Tampoco considera "normal" que en el centro de salud se sigan priorizando las citas telefónicas sobre las presenciales, porque es difícil contactar y además en los hospitales ya se atiende en persona. Ni que decenas de usuarios sigan esperando en la calle por una radiografía, por lo que plantea habilitar una carpa en el exterior u otras soluciones al problema. La construcción de un centro de especialidades -"seguimos defendiendo un CAR"- para la comarca que dé respuesta a las necesidades actuales y futuras, con previsibles "brotes cíclicos" es otra de las cuestiones que debe resolver la Consellería de Sanidade y que tanto el colectivo de usuarios como el gobierno local consideran que los responsables autonómicos deben abordar y consensuar.