El año 2007 ya había dejado rastros de otra "pandemia" temida en el sur de Galicia: la sequía, que se volvió a repetir diez años después con virulencia. Los efectos de aquella escasez de agua de lluvia se dejaron sentir de forma muy determinante en O Morrazo, donde hubo restricciones de agua y la comarca tuvo sus más y sus menos con Vigo, donde se sitúa el embalse del que se sirve la comarca a través de un doble emisario submarino.
A pesar de que a día de hoy todo queda oculto bajo la sombra del coronavirus, las administraciones, en este caso la Xunta de Galicia y el Concello de Cangas, se mantiene en alerta ante otra posibilidad de sequía, que ya temían algunos por las escasas lluvias de la primavera de la pandemia. El Concello de Cangas se va a acoger a la subvención que otorga el gobierno autonómico para confeccionar un Plan de Emergencia ante la Sequía (PES). De momento, ya cuenta con la memoria significativa.
El Concello de Cangas se sitúa dentro de la demarcación hidrográfica de Galicia-Costa y el PES deberá contar con una descripción y un diagnóstico de los sistemas de abastecimiento, con indicación de los recursos disponibles, las áreas de captación y la demandas de agua, un sistema de indicadores y escenarios coherente con lo recogido en el plan contra la sequía de su demarcación hidrográfica.
La estructura del PES se basará en el modelo y requisitos de la guía de redacción del plan municipal de emergencias y la gestión de riesgo de la sequía publicada por Aguas de Galicia en junio de 2019. El Concello hará constar la previsión de una suministración alternativa ante la situación de escasez coyuntural, razonable y proporcional a las concretas circunstancias que potencialmente se puedan producir, algo con lo que ahora mismo no cuenta Cangas. En la elaboración del proyecto del PES se quiere contar con las asociaciones de vecinos, los empresarios, comerciantes, agricultores, usuarios con consumo relevante y grandes consumidores, entidades que suministran el servicio de agua y Aguas de Galicia.
Se considera esencial un completo sistema municipal de abastecimiento y depuración de aguas de cara a una caracterización inicial del sistema que va a ser fundamental para la identificación de problemáticas y así proponer futuras acciones. Hará falta un completo esquema del ciclo integral del agua, tanto la red municipal.
Se va a necesitar también el volumen real del agua que se pueda extraer de las fuentes de recogida, así como datos del consumo de agua y aquellos que normalmente no se registran y que tienen especial incidencia en épocas de sequía, como agua de riego, agua para llenar las piscinas, agua para usos municipales o agua consumida en instalaciones colectivas.
El proyecto debe presentar una lista de costes de los servicios urbanos del ciclo integral del agua, incluyendo la recogida, depuración, distribución, transporte y depuración de aguas residuales urbanas. Se valorará el coste de inversiones en las infraestructuras actuales, así como el coste de explotación que el mantenimiento y prestación del servicio urbano requiere, desde la captura, el transporte en la descarga hasta su descarga al medio. El Concello debe incluir en el PES si tiene una asignación específica de fondos para la preparación y/o respuesta a la sequía, algo que no sucede en estos momentos.
