La Policía Local de Cangas, pendiente de lo que ocurría en tierra, no podía impedir lo que sucedía en el mar. Alrededor de 200 embarcaciones estaban fondeadas ayer en la ensenada de Barra. Alertados como estaban los foráneos de que el tráfico rodado se había restringido, se optó "atacar" por mar. En principio, solo se puede navegar, según la orden ministerial, no fondear, al menos en la primera fase que terminó ayer. Esto está provocando las quejas vecinales que ven como desde muy cerca de la orilla se toma el sol en el interior de una embarcación y los que lo hacen en la arena son advertidos por las fuerzas del orden. Precisamente este fin de semana, la Policía Local de Cangas realizó 16 denuncias por aparcamiento en zonas de playas y solo dos por incumplir la permanencia en playas de forma reiterada. Ante la avalancha ayer de bañistas, el gobierno local de Cangas está pensando en establecer la restricción de acceso a playas ya esta semana, sin esperar a que llegue julio. El buen tiempo y las ganas de libertad atraen a la gente a los arenales.

Por otra parte, vecinos de Viñó denuncian la llegada también de caravanas, además de la presencia de numerosos vehículos que no son de residentes.

Por su parte, el grupo municipal del Partido Popular de Cangas, a través de su portavoz Rafael Soliño, denuncia el mal estado de las playas. Asegura que están todas sucias y que eso va imposibilitar el distanciamiento social, porque hay menos sitio para ocupar. Manifiesta el edil del PP que el gobierno tuvo tiempo suficiente para poner las playas en perfecto estado de revista y abunda en la necesidad que se ofrezcan unos arenales completamente limpios, ante una época en la que la higiene debe ser la prioridad más absoluta.

Rafael Soliño considera que la medida que tiene el gobierno para restringir el acceso a las playas debió de ser más madurada y no basada tanto en la improvisación. Considera que está bien restringir el acceso del tráfico rodado, pero hay que ofrecer alternativas para que los foráneos puedan dejar el coche, bien a través de aparcamientos disuasorios situados fuera de la zona a partir de la cual no se puede entrar ya con el vehículo. También considera que es necesario que haya cierta coordinación con las líneas de transporte, con el fin de que puedan aumentar las frecuencias horarias e incluso las paradas. Rafa Soliño afirma que esta provisionalidad de la que habla se debe a la falta del denominado Plan de Movilidad de Cangas, que el gobierno retrasó una y otra vez y que ahora se antoja más que necesario.

Segunda fase

A partir de hoy, con la entrada de la segunda fase del desconfinamiento, la gente ya podrá acudir a las playas a tomar el sol y bañarse, sin ningún tipo de problemas, ni restricción horaria. Solo que deberá mantener la distancia de dos metros de seguridad con respecto al vecino de toalla. Se permitirán grupos de hasta quince personas.