Manolo Gil regenta la peluquería homónima en la calle Daniel Castelao de Moaña. "Abrí a las 8.30 horas. Antes que nunca para avanzar con toda la gente. Tengo hasta miércoles todo lleno con un cliente por hora", apunta mientras corta el pelo a un vecino del municipio. Su peluquería lleva 41 años abierta. Gil señala que no tuvo miedo de tener que cerrar el negocio por el confinamiento "porque estábamos todos cerrados y tendríamos clientes con la reapertura". Toma todas las medidas que puede "como guantes y batas para cada cliente, además de desinfectante continuo".