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Soldados de la Brilat patrullan por Moaña y la Policía sanciona a cuatro personas

El Ejército recorre el casco urbano y parroquias del rural del municipio por primera vez desde el inicio del estado de alarma -Una vecina de Meira fue sancionada ya tres veces

Dos soldados, ayer, en el entorno del muelle de A Mosqueira, al lado de un peatón.

El Ejército desplegó a varios soldados por Moaña durante el día de ayer, por primera vez desde que comenzó el estado de alarma hace un mes. Al menos cuatro efectivos de la Brilat (Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable Galicia VII) patrullaron ayer el casco urbano desde la alameda de concepción Arenal hasta la zona de O Con, a media mañana. Después se dirigieron también a varias parroquias del rural del municipio.

En el centro no habían puesto ninguna sanción. Los soldados explicaron que cada día acuden a una localidad distinta. El objetivo de estas rondas es visibilizar la obligación de confinamiento y contribuir así a que la población no se relaje en la toma de medidas excepcionales para lograr que se siga controlando la pandemia.

Hasta la fecha, en la comarca la Brilat ha patrullado ya por el centro de Bueu y ha intervenido en la residencia de mayores de Aldán para su desinfección tras el surgimiento del brote de Covid-19 y después de que la Xunta interviniese este centro privado.

Por otro lado, este fin de semana la Policía Local de Moaña ha sancionado a cuatro nuevos vecinos por incumplir el decreto de confinamiento y estar en la vía pública sin causa justificada. Una de las sancionadas, vecina de la parroquia de Meira, fue multada por tercera vez desde el inicio de las medidas contra la pandemia. Por ello, los agentes municipales la trasladaron a sus dependencias para realizarle un cacheo profundo, ya que frecuenta un presunto foco de venta de droga en Meira, en la zona de Reibón.

La Policía anunció a esta vecina que la próxima vez que sea localizada en la calle sin causa justificada sería detenida, y no solo identificada y sancionada.

Por otro lado, más allá de los controles para comprobar que se cumple con el decreto de confinamiento, los cuerpos de seguridad siguen atendiendo casos habituales relacionados con el tráfico. Este sábado, a las 20.30 horas, fueron requeridos por la Guardia Civil para realizar una prueba de alcoholemia a un conductor en el barrio de O Real, que dio positivo con una tasa de 0,42.

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