El alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos (ACE), se vio obligado a publicar un bando municipal en el que recuerda que todas las fuentes públicas ubicada dentro del término municipal del Concello de Cangas permanecen cerradas durante la vigencia del Real Decreto 463/2020, dado que son instalaciones donde se puede tener más contacto con manos o con la boca y no se puede garantizar la ausencia de Covid-19 en la superficie de los grifos o de otros elementos constructivos.

Los distintos departamentos de el Concello de Cangas procedieron estos días a precintar las fuentes, ya que se había detectado la presencia de personas recogiendo agua en distintas fuentes y manantiales públicos. Se recuerda, además, que en estos momentos el agua no se puede someter a los procedentes análisis de potabilidad, debido a la situación que se padece con el Covid-19.

El regidor local manifiesta que no se trata de un problema de potabilidad del agua, sino de que son lugares donde se puede contagiar fácilmente la población con el coronavirus. Xosé Manuel Pazos no entiende que pueda haber reticencias a la hora de cumplir lo que estipula el Real Decreto del 20 de marzo en este sentido, que trata de frenar los contagios. Insiste en que las fuentes y manantiales son lugares propicios donde se puede transmitir el coronavirus porque fácilmente una persona asintomática o positiva puede agarrarse al caño por donde sale el agua o beber por él. Añade que es algo que no se puede controlar, de ahí su precinto. Espera que este recordatorio sea suficiente y que no haya que tomar otro tipo de medidas para hacer cumplir esta prohibición.