Como ya avanzaba FARO este fin de semana, la Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Política Social, ha decidido intervenir los centros DomusVi de Aldán, en Cangas y Barreiro, en Vigo, tras el elevado número de positivos por coronavirus detectado entre sus usuarios y trabajadores. De este modo, se convertirán en dos residencias integradas, en las que residirán mayores que ya estén contagiados.
En el caso vigués, son 74 mayores y 11 trabajadores los infectados, mientras que Aldán suman 105 usuarios contagiados. Por el momento, en este centro no hay confirmación del número de positivos entre los trabajadores, aunque se baraja la cifra de 16 de entre una treintena.
Política Social está pendiente de los resultados de una segunda prueba a los usuarios que dieron negativo para que, una vez confirmados, sean trasladados a otros centros en función de sus necesidades. Uno de ellos será la residencia de tiempo libre de Panxón, en Nigrán, de titularidad autonómica y que actualmente se encuentra sin actividad.
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Se trata de las dos primeras intervenciones por la crisis del coronavirus que acuerda la Xunta para tomar el mando de geriátricos, una decisión que se ampara en el apartado tercero de la orden del Ministerio de Sanidad SND/275/2020, del 23 de marzo. Según esta orden, el Gobierno autonómico designará a un empleado público para dirigir y coordinar la actividad asistencial de estas dos residencias y garantizar así la correcta aplicación de los protocolos y la supervisión médica de los residentes. Esta persona dispondrá de todos los recursos materiales y humanos del centro.
Las pruebas a los residentes y trabajadores en Aldán, realizadas por la unidad sanitaria de Povisa, fueron realizadas el sábado coincidiendo con la entrada de la Brilat para realizar trabajos de desinfección, después de que la semana pasada se detectaran 6 casos que están hospitalizados.
