Poco después de las cuatro y cuarto de esta tarde la limpiadora del Concello de Moaña Isabel Labrador accedió al centro de salud de Domaio para iniciar las tareas de desinfección del espacio, después de que el viernes no abriese sus puertas tras conocer que uno de los enfermeros que trabajaban en el ambulatorio dio positivo por Covid-19. Pasará casi toda la tarde trabajando para que este centro pueda reabrir sus puertas el lunes. Dejaron el espacio cerrado los últimos tres días para minimizar el riesgo de que el virus continúa activo sobre alguna superficie.

"Ya limpiaron compañeros el miércoles por la tarde. Yo vengo sobre todo a desinfectaron todo, paredes, pomos , puertas... actuaré en todas las zonas", explica. Reconoce que está "preocupada. Como está todo el mundo. Esto no es ninguna broma. El enfermero estuvo en contacto con más gente y espero que no haya más positivos", relataba mientras se enfundaba el mono blanco de trabajo y se ponía las medidas de protección como guantes y mascarilla. La limpiadora municipal señala que no lo dudó cuando le pidieron de acudir a limpiar el domingo, "quieren reabrir mañana y tiene que quedar todo listo", apuntó esta trabajadora que lleva años en la plantilla municipal de limpieza. "Estábamos en casa pero sabíamos que nos podían llamar con situaciones de este tipo. Es la primera vez que me enfrento a una limpieza con estas características", reconoce.