Los empresarios del sector naval afectados por impagos de los grandes astilleros desde hace años y constituidos en una plataforma se reunieron ayer en Moaña con el director del Igape, Juan Cividanes, y otros responsables de esta entidad. La cita era esperada por los industriales que aguardaban alguna solución a su problema desde la Xunta. Sin embargo, a la salida reconocieron su "decepción" pese a lo cordial de la reunión.
Desde el Igape se les planteó como única alternativa participar en los cursos a través de un "coworking" para asesorar principalmente casos de segunda oportunidad. Esta formación comenzaría en cuanto se decidiesen los empresarios.
El portavoz de la plataforma, Balbino Barcia, señala que la inmensa mayoría de los afectados por estos impagos se muestran reacios a estos cursos. "Esperábamos una solución más clara para acabar con las deudas, porque nosotros no fuimos los culpables de que algunos astilleros no nos pagasen los trabajos. Puede que a algún empresario joven estos cursos le sirvan, pero la mayoría de nosotros ya no tenemos edad para emprender otra vez", apuntó. El colectivo no descartó volver a emprender acciones de protesta en la calle como la que llevaron a cabo finales de noviembre en Moaña.
En la plataforma se han organizado 13 empresarios, gran parte de ellos de Moaña, que suman en torno a 6 millones de euros de deuda.
Sus problemas empeoraron cuando acudieron a los bancos para financiar trabajos en el sector que después los astilleros o las subcontratas no les pagaron, dejándoles con graves problemas financieros.
Su petición de ayudas a las administraciones llegó incluso al Parlamento gallego y obtuvieron el respaldo de todas las corporaciones municipales de O Morrazo así como de las principales centrales sindicales. "Llevamos un palo con la primera crisis de Barreras y algunos están llevando un segundo palo ahora", lamenta Barcia.
Temen que los cursos prometidos supongan una patada hacia adelante a sus problemas a la espera de que pasen las elecciones autonómicas, de ahí que saliesen "decepcionados" de la reunión celebrada ayer y que se prolongó durante más de una hora y media.
