"Nos sentimos ahogados, acosados, presionados, perseguidos. No somos delincuentes, no somos ciudadanos de segunda, no somos súper héroes. Solo queremos vivir dignamente de nuestro trabajo. Y alzaremos la voz hasta que se nos escuche. Queremos esas prestaciones que nos corresponden por derecho como al resto de trabajadores". Así destacó la portavoz de la Asociación de Autónomos Unidos para Actuar (AUPA), Olaia Fernández, de Navarra, en el manifiesto con el que se cerró la primera manifestación de los autónomos de esta plataforma, ayer en Madrid, y a la cual acudieron una treintena de empresarios de Moaña y de Cangas. La manifestación recorrió el centro de Madrid, desde la Plaza de Colón hasta la Plaza de la Lealtad, pasando por el Paseo del Pardo y reunió a unas 5.000 personas, según la Delegación del Gobierno en Madrid.

Desde Galicia se desplazaron en torno a unas 300 personas, tal y como señala la tesorera de AUPA,Graciela Martínez., autónoma de Vigo en donde trabaja como administrativa en el taller de su marido. Asegura que 60 lo hicieron en un autobús que partió de madrugada desde A Coruña, recorriendo Vigo y Ourense; mientras que otros lo hicieron en coches particulares. Es el caso del moañés Enrique Costas, empresario autónomo del textil, que reivindica mejores condiciones laborales para el colectivo, tener las mismas prestaciones que los asalariados, como el derecho al paro, bajas y a cobrar el Salario Mínimo Interprofesional. Explica que los autónomos tienen paro "pero tienes que justificar que has estado en la bancanrrota dos años antes. ¿Cómo vas a estar dos años seguidos con pérdidas; cómo vives?". Critica las condiciones de ese derecho a paro de los autónomos, dice que si además son dos socios, solo cobra uno y en cuanto a las bajas laborales, por la cotización mínima reciben unos 800 euros al mes, pero de esa cantidad hay que descontar los 300 euros que hay que pagar todos los meses a la Seguridad Social: "Nos quedan 500 euros. ¿Da eso para vivir tu familia y tú?". Por lo que respecta a los empleados, dice que en su caso paga 1.500 euros a la Seguridad Social por tres trabajadoras, pero que si una tiene que coger la baja, él siguepagando a la Seguridad Social unos 480 euros, recibe una bonificación del 75% del sueldo de la empleada, pero tiene que seguir pagando el 25% restante y, además, pagar a la nueva empleada. Aún por ecnima de estos pagos, señala que a ellos le shan subido la cuotas en 60 euros: "Todas las mejoras anunciadas por los gobiernos han sido mentira", señala el autónomo moañés.

La viguesa Graciela Martínez asegura que los autónomos son "ciudadanos de segunda, pero a la hora de pagar son ciudadanos de primera y sin derechos". Compara la situación del colectivo como las hojas que firmas en un banco que una cosa es lo que figura a primera vista, y otra la letra pequeña, "pues con el autónomo pasa así".

Graciela Martínez asegura que la Plataforma AUPA es independiente, no está atada a ningún partido,nació a través de un periódico digital cuando en 2017 en un debate sobre la reforma laboral, en el que se empezaron a criticar las subida de cuotas a los autónomos. Ahí surgió el movimiento con las primeras cinco personas, entre ellas esta viguesa, uqe ahora en facebook dice que tiene 40.000 autónomos seguidores y 400 pagando la cuota voluntaria de 16, 23 euros al año. La decisión de convocar esta manifiestación fue al cuplirse un año de las primeras concentraciones que AUPA realizó de forma simultánea en las principales ciudades del país, como fue en Vigo, en donde reunieron a unas 150 persona delante del Marco. Ahora quisieron unirse en Madrid para dejar ver que se sienten maltratados "y sin autónomos no hay empleo, economía, ni futuro, pero somos una especie en peligro de extinción".