La corporación de Moaña se reunirá en un pleno extraordinario este viernes a las nueve de la mañana, según la hora de convocatoria. La sesión fue forzada por el PP, que ya había anunciado su intención de exigir esta convocatoria para debatir las dos mociones que presentaba al pleno de diciembre que finalmente no se celebró al no contar el Concello con secretario.
La alcaldesa fijó la sesión para primera hora de la mañana entre quejas del propio PP, que solicitó por escrito el horario habitual de las 20.00 horas argumentando que los concejales de la oposición no cuentan con dedicación exclusiva o parcial y acudir por la mañana dificulta su conciliación familiar y laboral.
La alcaldesa, sin embargo, mantiene su decisión de celebrar la sesión por la mañana. Alega que el reglamento municipal no fija para los plenos ordinarios ningún horario obligatorio y que por la mañana la secretaria municipal está en su horario laboral. Descarta también el argumento de la conciliación alegando que los ediles "tienen derecho a solicitar en sus puestos de trabajo el tiempo libre necesario para asistir a los órganos colegiados del Concello".
El asunto principal del pleno será de nuevo la crisis abierta por la entrada en funcionamiento este curso del camino escolar seguro de acceso el CEIP Tirán. Esta misma semana el Concello se comprometió con los vecinos de la zona a que podrían acceder a sus garajes en ambos sentidos, pues ahora sufren el sentido único descendente desde el comienzo del curso. A cambio, los vecinos aseguraron que no utilizarían el doble sentido en el horario de entrada y salida del colegio para evitar los atascos.
La nueva medida no entrará en vigor hasta que el Concello contrate e instale las nuevas señales de tráfico que estipulen el sentido único con excepción del acceso a los garajes.
El gobierno local, por su parte, se comprometió a simplificar la señalización horizontal que según los residentes es ahora demasiado confusa. También se construirán varios resaltes en el firme para reducir la velocidad media de la circulación y se comprometió, el bipartito, a retirar más pivotes que delimitan la zona peatonal para facilitar las maniobras de entrada a los garajes.
