El Concello de Moaña ha trasladado a la Consellería de Educación el informe de la Policía con los datos y los daños causados por la caída del árbol de 14 metros que el pasado lunes se desplomó desde el patio del CEIP Reibón sobre dos coches en la PO-551. Entiende el Concello que las responsabilidades por daños en los vehículos corresponden a la Xunta, como titular del centro.
La alcaldesa, Leticia Santos, aclara que la dirección del centro mostró su preocupación por el estado del árbol ya en 2018. Valorada por el equipo de jardinería se confirmó que estaba vivo y no presentaba peligro. El jueves de la pasada semana el director volvía manifestar su preocupación. El chopo cayó por un golpe de viento antes de poder realizar una comprobación. Al caer se pudo determinar que el árbol seguía vivo aunque las raíces se distribuían hacia el cierre del colegio, de ahí que el viento lo tirase. La regidora insiste en el Concello solo tiene como competencias el mantenimiento, conservación y vigilancia en los colegios y que una tala de este tipo superaba sus competencias. En último caso, al tratarse de algo extraordinario, el Concello debería contar con una autorización de Educación que contemplase las medidas de seguridad.
