Una reunión familiar en la noche del viernes en la casa paterna del barrio de Couso, en la parroquia moañesa de Meira, pudo haber acabado en una desgracia si no es porque uno de los nietos de 19 años, que estaba en la vivienda,empezara a dar los primeros síntomas de una intoxicación por monóxido de carbono, con mareos y náuseas. Abuelos, hijas y nietos estaban reunidos en la vivienda para disfrutar al día al día siguiente a un boda en Moaña. La intoxicación, de la que se investiga si fue por un calentador de gas o por una de las chimeneas de leña que tiene la casa, afectó finalmente a seis de ellos, que fueron hospitalizados: el propietario de 65 años y cinco nietos, aunque fueron dados de alta ya por la mañana.

Cuando ocurrieron los hechos se encontraban en la casa el propietario y sus dos hijas con sus respectivas parejas y cinco hijos. Sobre las once de la noche llegaba la madre. Una de las hijas se había desplazado desde A Coruña y la familía iba a dormir en la casa para asistir a la ceremonia. Cuando comenzó el problema a medianoche, todavía parte de la familia estaba despierta en la planta baja en plena reunión.

Tal y como señala el marido de una de las hijas y después de haber superado el susto, cuando la familia charlaba abajo, uno de sus sobrinos, de 19 años, empezó a sentirse mareado y decidieron llevarlo al Centro de Salud, en la Casa del Mar. Cuando ya estaban allí, les llamaron por teléfono de que su hija mayor de 10 años, también estaba padeciendo los mismos síntomas con náuseas y mareada, y acto seguido su cuñada de 40 y otra niña de 12. Desde el Centro de Salud los profesionales alertaron de que podría tratarse de una intoxicación por monóxido de carbono y se puso en conocimiento del 112. Era sobre la una de la madrugada. Según informa el 112, esta persona confirmó a la central que había acudido al centro de salud, acompañado de otros tres familiares y que en el domicilio quedaban otras cuatro personas por lo que se movilizó al 061, Bomberos do Morrazo, Guardia Civil, Policía Local y empresa suministradora de gas.

Técnicos de la empresa analizaban ayer si el monóxido de carbono se había producido realmente por una mala combustión por el calentador de gas o por el contrario fue por una de las chimeneas de leña que tiene en la casa, quizás la de uno de los dormitorios.