"Entendimiento", "coincidencias", "satisfacción", "interés común". Son algunas de las expresiones que emplearon los representantes del Concello y de la UTE Gestión Cangas tras la reunión celebrada ayer para "valorar" la posibilidad de ejecutar el plan de inversiones por importe de 3,4 millones de euros comprometido por la empresa como contrapartida por el contrato de concesión del servicio integral del agua durante 25 años y que, si no se ha ejecutado hasta ahora, dicen, es porque el ejecutivo cangués no ha querido. El cambio de caras en el ejecutivo local, con los socialistas Hugo Fandiño y Eugenio González al frente de las concejalías de Urbanismo e Medio Ambiente y Obras se traduce en un cambio en las relaciones bilaterales, y ambas partes ya anuncian que después de navidades se presentará un anteproyecto para la mejora "integral" de los bombeos de Vilariño, Liméns, Duchas y Santa Marta, además de mejorar su canalización hasta la estación depuradora de aguas residuales (Edar) de Balea.
Ni el alcalde, Xosé Manuel Pazos, ni el gerente de la UTE, David Soneira, ni el edil de Obras evitaron reconocer que hay disposición a invertir el dinero comprometido y que, junto a la mejora "inmediata" de la Edar para dotarla del sistema de depuración "terciaria", con rayos ultravioleta, o la renovación de la red de abastecimiento y saneamiento en Espíritu Santo, la solución a los bombeos de O Hío está entre las actuaciones prioritarias que se quieren acometer a cuenta de la concesionaria del agua. Desde la empresa coinciden en que esa actuación debe ser "integral", porque si se interviene solo en Vilariño el problema se trasladaría a los bombeos próximos de Liméns o Santa Marta, con el "lógico" rechazo vecinal. El regidor coincide con ese análisis y esperará a que la empresa presente el anteproyecto para "valorarlo" y realizar las aportaciones que se consideren necesarias para darle el visto bueno desde el Concello.
En el encuentro de ayer no participó el concejal de Facenda, Mariano Abalo, el cargo municipal que se ha mostrado más crítico con la concesionaria y que aboga por rescindirle el contrato. Desde el PSOE ironizan sobre esa posibilidad y dan por hecho que los deseos de Abalo no se cumplirán mientras ellos sean socios de gobierno. Eugenio González rechaza que el Concello dedique a resolver los vertidos de Vilariño alrededor de 400.000 euros, más de la mitad del presupuesto anual que destinaría a inversiones, cuando la UTE se compromete a realizar una intervención más amplia y "con la mitad del dinero", que ejecutarían con sus propios medios a lo largo de 2020.
Mientras, el alcalde mantiene una actitud práctica y trata de dar soluciones sin comprometer la cohesión entre los socios del gobierno por las distintas "sensibilidades" con respecto a este asunto. Pazos defiende el "diálogo" con la concesionaria y que se ejecute el plan de inversiones comprometido por contrato, al margen de que este llegue o no a rescindirse y cuya polémica prefiere esquivar. Certifica que la concesionaria tiene interés en ejecutar las inversiones que figuran en el contrato y que el Concello tiene más que ganar que perder en este asunto, aunque sin dar cheques en blanco.
Consenso vecinal
Los acuerdos alcanzados ayer, de palabra, entre el Concello y la unión temporal de empresas (UTE) que forman Aqualia y Civis Global los trasladó poco después a los colectivos sociales de O Hío a través del presidente de la asociación de Liméns, un colectivo que en las últimas semanas mostró su malestar por que se planteara una solución puntual a los vertidos en Vilariño que podría perjudicar a lugares vecinos. El alcalde los citará en las próximas semanas para analizar la situación y las soluciones que se plantean, aunque para ello esperará a tener sobre la mesa el anteproyecto de la concesionaria.
