La Guardia Civil detuvo ayer a dos jóvenes cuando abandonaban su coche, que estaba ardiendo, en el puente de Rande. A los dos se les imputa un delito contra la seguridad del tráfico, aunque por razones diferentes: al conductor del coche por el hecho de que estaba conduciendo pese a tener retirado el carné por sentencia judicial y a su acompañante porque fue identificado unas horas antes realizando maniobras peligrosas con otro coche en Poio.
El coche en el que circulaban los dos jóvenes comenzó a arder cuando estaban en el puente de Rande. Al parecer el automóvil circulaba con una rueda pinchada y comenzó a arder a raíz de una avería. Los ocupantes intentaron abandonar el automóvil antes de la llegada de la Guardia Civil y del resto de operativo de emergencias, entre los que estaban los Bombeiros do Morrazo y los de Vigo. Los agentes localizaron al conductor muy cerca del lugar y procedieron a su detención por poner en peligro la seguridad del resto de personas que circulaban por al autopista. Además, se comprobó que tenía retirado el carné por sentencia judicial.
El segundo ocupante también resultó detenido después de comprobarse que había sido identificado previamente en Poio por realizar maniobras peligrosas, como trompos, con otro vehículo.
El automóvil circulaba en dirección Vigo y lo hacía por la plataforma central. El suceso ocurrió alrededor de las 7.30 horas y obligó a desviar todo el tráfico que procedía de O Morrazo y Pontevedra hacía el carril lateral del puente. Esta situación generó retenciones durante aproximadamente una hora.
