Los trabajos constructivos de la piscina de Bueu está previsto que experimenten un notable avance durante las dos próximas semanas. La empresa contratista inició estos días el proceso para impermeabilizar el vaso, que ocupa una superficie de unos 300 metros cuadrados. El trabajo tendrá que realizarse en dos fases porque la maquinaria tendrá que acceder al foso para realizar desde allí una serie de obras en la cubierta del edificio. El vaso tiene una longitud de 25 metros por un ancho de 12, según figura en el proyecto.

La interrupción de los trabajos durante el verano significó dejar a medias la instalación de las chapas metálicas en el perimetro de la construcción, unos trabajos que se retomaron esta misma semana, tal como explican desde el gobierno local. Las obras que se desarrollan en esta fase incluyen también la colocación de los cristales, cableado o la instalación de los falsos techos en la planta baja del edificio.

La obra de la piscina municipal de As Lagoas se retomó hace veinte días, después de una prolongada interrupción de casi cuatro meses tras la jubilación del anterior arquitecto municipal. Concello y empresa contratista fijan la fecha de conclusión de los trabajos para mayo del próximo año. Después el gobierno local deberá decidir cómo afronta la gestión de este nuevo servicio, que podría hacer de manera directa o bien a través de una concesión a una empresa.