Después de una semana con los furanchos abiertos, las Festas de San Martiño retomaron ayer su programación oficial y lo hicieron con una velada cultural que protagonizó en su primera parte el investigador local Manuel Uxío García Barreiro con una conferencia sobre el culto a San Martiño y a la virgen del Carmen en Moaña desde el siglo XII. Después actuaron los grupos de cámara de la Escola Municipal de Música en un concierto que permitió a los alumnos exhibir su nivel musical. El acto concluyó con una visita a la exposición permanente sobre la historia de Moaña desde el Siglo I, con la novedad de un panel con la foto de uno de los sarcófagos labrados en la piedra que se encuentran a 1,65 metros de profundidad y que forma parte de la llamada "necrópolis de San Martiño".

García Barreiro explica en la exposición que durante el control de la excavación realizada en el atrio en el año 2006 se llegó a la zona de mayor profundidad en donde se encuentra la fosa de enterramiento excavada en la piedra, "por lo que pensamos que sería el enterramiento más antiguo". Las tumbas están orientadas hacia el noroeste, siguiendo la orientación del propio templo.

El nuevo panel explica también que el material cerámico encontrado en 2006 es bastante diverso, desde una teja de época galaico-romana hasta cerámica contemporánea, pasando por restos materiales de adscripción medieval o moderna, dejando claro que la ocupación del lugar se mantiene desde épocas antiguas.

Pero más allá de la historia, la noche del viernes para el sábado estuvo marcada por una alta afluencia a los furanchos tradicionales, que despacharon litros y litros de vino de casa así como productos gastronómicos propios del otoño. Hoy, al mediodía, ya volverán a estar concurridos los furanchos para la sesión vermú.

Además, la música sonó hasta bien avanzada la madrugada en el aparcamiento de O Casal con una edición más de la Jam Martiño que organizan jóvenes músicos de la comarca y que cumplió su 11º año pese a nacer casi como una fiesta particular. El grupo "De Trapo" abrió la velada a las diez de la noche y poco a poco se fueron sumando músicos de los más distintos estilos, tanto integrantes de grupos como aficionados, para extender la noche de fiesta.