La noche de Halloween en Moaña se ha saldado con una broma costosa para los propietrios de por lo menos seis vehículos -cinco coches y una furgoneta- estacionados en la urbanización de O Rosal, en la zona más próxima a los institutos. Las ruedas de los vehículos, en algunos casos los cuatro neumáticos, aparecieron pinchadas y la Policía Local está investigando lo que se supone que ha sido un acto de vandalismo propio de la noche del Samaín.

El suceso ocurrió en la noche del jueves para el viernes. Los vehículos estaban estacionados en ambos márgenes de la calle y las ruedas mostraban cortes de haber sido rasgadas con un objeto punzante. En la zona no apareció nada resto de nada, y todo apunta una gamberrada de mal gusto de la noche de Halloween.

El mes pasado también hubo varios robos a coches con un mismo modus operandi, rompiendo una de la ventanillas. Se vieron afectados cuatro vehículos en Tirán y otro más en Meira. En esa ocasión, la rotura de la ventanilla fue para robar ya que los coches estaban revueltos en su interior y en algunos faltaron objetos. En este último caso de las ruedas pinchadas, el objeto era solo hacer daño.

El coste para los dueños será importante porque solo si el vehículo tiene el seguro a todo riesgo, se cubren estos daños.