Un aparatoso accidente de tráfico ocurrido a última hora de la tarde del domingo se saldó sin heridos, pero con cuantiosos daños materiales. El conductor de un vehículo que circulaba por la carretera general PO-313 en dirección ascendente -hacia Marín- perdió el control del vehículo e impactó contra el muro de una vivienda particular, a la altura de una tienda de alimentación. Como resultado del impacto el muro acabó derribado y el vehículo con daños graves en su parte frontal.

Hasta la zona se desplazaron efectivos de la Policía Local de Moaña que comprobaron que el conductor y único ocupante del coche se encontraba aparentemente ileso, pese a los sorprendente del impacto.