Las dos Meiras estuvieron ayer más hermanadas que nunca. Y es que tres autobuses con 121 vecinos del concello lucense llegaron ayer a Moaña para conocer a la parroquia que se llama como su pueblo, en una excursión que partió del párroco de la localidad lucense -Miguel Asorey- y que desplazó al municipio moañés a estos vecinos, entre los que además también viajó el alcalde Antonio de Dios y el regidor por accidente, Agustín Méndez.

Los autobuses llegaron al consistorio moañés a las 13.00 horas en donde representantes de todos los grupos de la corporación le ofrecieron un acto de bienvenida. La alcaldesa, Leticia Santos, les explicó lo "esencial" del mar en la cultura local y les agasajó con una escultura de una mariscadora realizada por Lito Portela. Desde la Meira lucense se regaló a Moaña cerveza realizada con el trigo de la Festa da Malla, entre otros presentes. La comisión de fiestas, artífice hace casi dos años de este hermanamiento, confeccionó una postal con la dos localidades.

Los lucenses visitaron zonas como la Illa de Samertolaméu, el Museo das Carreiras o el centro de Moaña tras una comida conjunta.