Por alguna razón, los cien días de gobierno son un punto de referencia para gobierno y oposición, como sin en ellos se marcaran la pauta de lo que va a ser un manato. Son plazos que los políticos tienen grabados a fuego en su curiosa y selectiva memoria. El gobierno de Moaña hizo el balance de los cien días. El bipartito formado por BNG y PSOE está convencido de que hizo avances muy importantes, como la tramitación del Plan Especial d e Sisalde, mientras que el que se pronunciaba ayer en Cangas era la oposición. Claro está que para el Partido Popular, partido mayoritario en la corporación canguesa, fueron cien días sin gobierno, cien días de Botafumeiro. Aquí el PP se adelantó al gobierno, también bipartito, pero formado ACE-PSOE, que fijó para mañana su rueda de prensa para analizar sus logros a lo largo de este tiempo. Claro que el gobierno de Cangas lo tiene más difícil que el de Moaña a la hora de explicar sus logros: tardó mucho más en ponerse en marcha debido a lo difícil que fue llegar a un acuerdo de gobierno.

El PP habla de un alcalde "missing" que presume de gran éxito electoral a pesar de encabezar un gobierno que en estos momentos tiene 6 concejales. El PSOE tampoco tuvo mucho tiempo de hacer cosas en Cangas. Sus dos concejales principales ya dimitieron. El bipartito moañés habla de un gobierno comprometido con la participación vecinal y la transparencia de la gestión, que continuará " a desenvolver proxectos transformadores para a nosa vila, buceando sempre o benestar dos moañeses e moañesas", concluye.