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El bipartito se reafirma en los Camiños Escolares Seguros

Discusión entre una vecina y la regidora. // Santos Álvarez

El enfrentamiento político se endureció durante el debate de la moción del PP en la que demandaba suspender el funcionamiento del Camiño Escolar Seguro de acceso al CEIP Tirán que se puso en marcha este curso. Los populares pedían la apertura de una comisión con los vecinos ante las críticas por parte de algunos residentes, así como el despliegue de agentes de la Policía Local en la zona para garantizar la seguridad hasta que se adopte una alternativa. PP y XM se quedaron solos en el voto a favor de la propuesta, que fue rechazada por los grupos del gobierno local.

Desde el BNG el edil de Urbanismo, Odilo Barreiro, se mostró confiado en que el uso del camino seguro que prioriza el acceso peatonal será un éxito. Aludió a las directrices de la Unión Europea en ese sentido y aseguró que "asumimos a nosa responsabilidade nesta materia aínda que conleve algunhas críticas". Es más, Barreiro señaló que seguirán apostando por la construcción de viales de este estilo en el resto de colegios de Moaña. De hecho, en Domaio ya comenzaron las conversaciones con los vecinos y la dirección del colegio. "Todas as actuacións que faga este goberno irán destinadas a que os peóns gañen máis espazo fronte aos coches", añadió para apuntar también que la comunidad educativa está "satisfeita".

El debate del asunto, que llegó ya a medianoche, enfadó a un grupo de vecinos de la zona afectada, que desde que se pusieron en marcha las nuevas direcciones protestan por el rodeo que deben dar para acceder a sus casas. Una vecina acabó discutiendo con la alcaldesa antes de abandonar la sesión.

El que si intervino, pues había solicitado la palabra por Rexistro, fue el presidente de la Asociación de Veciños de Tirán, Francisco Ferreira, quien agradeció que se tomasen medidas en los últimos días para facilitar, por ejemplo, el acceso de los residentes a sus garajes. Ferreira pidió un "consenso dos partidos políticos" para llegar a soluciones" y apeló a la búsqueda de aparcamientos disuasorios provisionales mientras el proyecto no se consolide. Pidió también que se ponga fin a los actos vandálicos contra las señales.

El portavoz del PP, José Fervenza, fue el defensor de la moción y acusó al bipartito de "entrar como un elefante nunha cacharrería e executar unha obra sen o consenso necesario". Llegó a calificar este camino escolar seguro de "timo" por su alto coste y pidió "sensatez" para su reformulación, "porque se está a enfrentar a uns veciños con outros".

Por el PSOE, Marta Freire recordó la asamblea con vecinos de julio y pidió paciencia para analizar el funcionamiento de esta nueva experiencia en un plazo de tres meses, "porque apenas levamos unhas semanas de escola". Aseguró que estarían dispuestos a acometer modificaciones "se nos equivocamos".

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