La recuperación del Camiño Real de Tirán, en el marco del proyecto conjunto de Cangas y Moaña denominado "Eixo de mobilidade amable e segura de interconexión dos centros urbanos", está ya en obras sobre el terreno. Ayer inició su trabajo el topógrafo de la empresa adjudicataria, Covsa. Inició su tarea desde el mirador de A Masandía y a lo largo de los próximos días recorrerá todo el trazado en Moaña, de 2,4 kilómetros, para balizar los distintos espacios que tendrá el vial en su apuesta por priorizar la circulación peatonal y en bicicleta frente al tráfico rodado. Inició el marcado de todos los límites de la actuación, desde las zonas que se pintarán de azul para separar a los peatones de los coches hasta los puntos en los que se deberán instalar las luminarias para mejorar la seguridad. Habrá farolas cada 15 metros.

El topógrafo estará varios días trabajando sobre el terreno antes de que Covsa traslade a la zona la maquinaria y el material para iniciar la parte más visible de las obras. El plazo estipulado para que todo el Camiño Real se encuentre reformado es de seis meses, aunque las condiciones del tiempo serán importantes en el devenir de unos trabajos que afrontarán en otoño e invierno sus principales fases. El coste asciende a 485.300 euros y el diseño final, con superficies de color azul, será similar al del Camiño Escolar Seguro que se construyó este verano y que ayer se estrenó como acceso peatonal para los niños del colegio de Tirán, logrando que un alto número de familias acudiesen al centro en el primer día de escuela caminando, evitando el colapso de coches que era habitual en el entorno de este colegio.

Desde el Concello la alcaldesa, Leticia Santos, explica que mantuvieron reuniones en las últimas semanas con las personas propietarias del entorno del camino. Agradeció la participación en estas conversaciones de la Asociación de Veciños de Tirán, que sin duda ayudó a la "boa predisposición" de los vecinos para facilitar el correcto desarrollo de los trabajos. Logró el Concello los permisos para acceder a los terrenos para reforzar muros de contención, así como los permisos para instalar algunas de las nuevas luminarias atornilladas en los muros de cierre de las zonas de vial más estrecho.

La parte más visible de la actuación consistirá en la delimitación de una senda peatonal y carril bici desde el malecón de O Con hasta el límite municipal con Cangas. El Camiño Real cruza la carretera general (PO-551) en las inmediaciones del supermercado Lidl. A lo largo de los trabajos se antoja necesario acometer cortes de tráfico temporales, sobre todo en la construcción de muros de contención.

Se interrumpirá también el tráfico de forma diaria cuando se extienda el material de color azul, que servirá para marcar la zona peatonal, pues es necesario evitar que se pise hasta que la pintura esté seca para que no queden huellas.

La obra será más compleja que la del camino escolar y el ancho del vial lo marcarán los límites físicos de las propiedades, por lo que será igual al actual. La circulación para el tráfico rodado pasará a estar limitada a solo 20 kilómetros por hora.

La actuación implica también la reordenación de plazas de aparcamiento que dificultan la circulación de los coches como la bajada a la iglesia de Tirán, que seguirá siendo de doble sentido. Aparecerán tres nuevas zonas de estacionamiento en O Con, frente al Plan Parcial del Monte do Con, en los terrenos de la cesión, que supondrán 14 plazas de aparcamiento. En la bajada al camping existirán aparcamientos en ambas márgenes. El tráfico se limitará solo a residentes en A Masandía y existirán sentidos únicos en la zona de Catro Camiños y en el tramo del cruce de Castroviejo hacia el camping.

La fase de Cangas está más retrasada, con las bases de la licitación todavía en redacción.