Un total de 20 alumnos concluyó ayer una formación de nueve meses orientada a la conservación y protección del medio forestal, que se impartió en el marco del taller de empleo "A Granxa da Rúa VIII", cofinanciado por la Consellería de Economía, Emprego e Industria y el Concello de Cangas. Casi la mitad de los inscritos ya han conseguido un contrato laboral en varias comunidades de montes de la comarca de O Morrazo. Los contenidos de esta edición de la escuela taller estaban centrados en operaciones de vigilancia y extinción de incendios forestales y apoyo a contingencias en el medio natural y rural, así como en actividades auxiliares de conservación y mejora de los montes, repoblación forestal y tratamiento silvícola.
Ayer era el último día y los participantes recibieron la visita del director xeral de Orientación e Promoción Laboral de la Xunta, Pablo Casal; del alcalde del concello, Xosé Manuel Pazos; que les entregaron los diplomas acreditativos en los montes de O Hío. La finalidad de la formación de esta nueva edición del taller de empleo tiene como objetivo enseñar un oficio en materia forestal a sus alumnos. El trabajo se orientó en dos direcciones. La primera se centró en operaciones de vigilancia y extinción de incendios forestales y apoyo a contingencias en el medio natural y rural, lo que permitió la obtención de un certificado de profesionalidad de nivel 1. La segunda estaba orientada a las actividades auxiliares de conservación y mejora de los montes, repoblación forestal y tratamiento silvícola, que posibilitaba la consecución de un certificado de nivel 1 y de nivel 2 tras sus finalización.
El presupuesto para esta edición alcanzó los 320.000 euros. Los matriculados contaron durante estos nueve meses con formación teórica y práctica. "El desarrollo de proyectos en entornos reales es fundamental. Si queremos que nuestros alumnos obtengan la cualificación necesaria para ejercer esta profesión, necesitamos que practiquen", explicaba la directora de la escuela taller, Teresa García Tarjuelo. La Xunta permitió este año por primera vez que la formación práctica se desarrollase fuera de las instalaciones de las escuelas taller, lo que en el caso de Cangas permitió a los matriculados trabajar en terrenos de las comunidades de montes de Coiro, Darbo y O Hío.
Las tareas que realizaron durante ese periodo de formación tenían como finalidad dar respuesta a algunos de los requerimientos de los vecinos de la zona. Por ejemplo, en los montes de O Hío se colocaron medidas de seguridad para evitar que los animales de pastoreo puedan dañar los árboles jóvenes.
Este taller de empleo tiene carácter dual, lo que significa que algunos de los participantes tienen la posibilidad de trabajar al menos tres meses más en entidades de la zona y en la especialidad en la que se cualificaron. Este es el caso de siete de los alumnos de "A Granxa da Rúa VIII", que serán contratados por las comunidades de montes de Coiro, Darbo y O Hío. Para incentivar este tipo de actuaciones, la Consellería de Economía, Emprego e Industria subvenciona al empleador con 1.500 euros por cada trabajador contratado.
Lograr la inserción de personas en riesgo de exclusión social es otro de los objetivos que persiguen en este tipo de programas. El taller desarrollado en Cangas ha contribuído a este hecho, proporcionando una orientación a sus participantes. " Tras la finalización del taller, cinco de nuestros alumnos han decidido continuar formándose en esta materia cursando un ciclo de FP", destaca Teresa García.
La colaboración del Concello ha sido fundamental para el correcto desarrollo de la actividad formativa. "Nos ha permitido proporcionar una formación de calidad a nuestros alumnos al dotarnos con medios de Protección Civil para nuestras obras y servicios, así como otros recursos que hemos necesitado", concluye la directora de la escuela taller. El balance arroja una "experiencia positiva" y los alumnos se mostraron agradecidos por la oportunidad.
