La aprobación de un nuevo Regulamento de Participación Veciñal (RPV) era una de las prioridades expresadas por la Asamblea Cidadá de Bueu (ACB) durante las negociaciones para formar un gobierno bipartito y es una de las primeras medidas que ha logrado impulsar en este primer mes. Hoy se abre el periodo de consulta pública previa a la aprobación de un texto que pretende dar mayor presencia a los vecinos en los asuntos municipales.

El anuncio está ya colgado en la página web del Concello de Bueu y todas aquellas personas, colectivos y organizaciones que lo deseen dispondrán hasta el 19 de agosto para presentar sus sugerencias [un periodo de 15 días hábiles]. Es un trámite anterior a la aprobación inicial, a la que luego deberá seguir una exposición pública. El vicealcalde y responsable del área de Veciñanza, Julio Villanueva, ha recuperado el texto que se presentó durante el anterior mandato municipal y que estaba consensuado entre PP, PSOE[cuyo portavoz, José Manuel Vilas, fue quien lideró la iniciativa] y ACB, en aquel entonces todos en la oposición. "Xa me puxen en contacto cos voceiros para explicarlles a iniciativa e que a proposta é a mesma que acordamos daquela", afirma Julio Villanueva. El concejal de ACB afirma que el anterior gobierno local "si que iniciou a súa tramitación", aunque la carga de trabajo en el departamento de Secretaría impidió sacarlo antes. "Esta semana puiden falar coa secretaria municipal e puxemos o expediente en marcha", añade.

El actual RPV de Bueu data de 1996 y todos los grupos de la corporación coinciden que necesita una profunda actualización. La propuesta regula instrumentos de participación como la iniciativa vecinal, la consulta a los vecinos o la creación de órganos específicos de participación, como los "consellos" sectoriales y parroquiales. "O obxectivo é que a cidadanía aumente a súa capacidade de decisión dotándoa de mecanismos e estruturas de participación que tamén permitan incorporar as novas tecnoloxías", argumenta el vicealcalde bueués.

Los asuntos que pueden ser objeto de una consulta popular o referéndum deben ser de "competencia propia municipal e de carácter local, que sexan especialmente relevantes para os intereses dos veciños". De este apartado quedan excluidos los temas relacionados con la hacienda local. La consulta puede ser impulsada por la corporación o bien responder a una petición colectiva, que debe estar respaldada por al menos el 5% de la población que forma parte del censo electoral municipal [los mayores de 18 años].

El texto está inspirado en el reglamento del Concello de Vigo y Villanueva confía en que la creación de los "consellos parroquiais" abra la puerta a la elaboración de unos presupuestos participativos, en los que cada parroquia pueda pronunciarse.