La segunda reunión formal entre el BNG y el PSOE de Moaña para tratar de firmar un pacto de gobierno que reedite el actual bipartito siguió el mismo tono "cordial" de la reunión del viernes. Además, ambos lados de la mesa negociadora llegaron a un acuerdo total del programa de gobierno, que tendrá más de 40 puntos y que se redactó de forma literal, aunque los representantes de ambas formaciones declinan hacerlo público hasta que sea comunicado y sometido a votación ante sus respectivas asambleas.

En dicho acuerdo de gobierno se integra también la finalización del paseo marítimo de Seara, que en las últimas semanas fue el gran punto de fricción entre socialistas y nacionalistas al no acudir los primeros a la mesa de diálogo en la que se conocía el anteproyecto conjunto para acabar la senda peatonal y rehabilitar los astilleros tradicionales protegidos por Patrimonio. Eso sí, aunque llegaron a un acuerdo sobre este asunto, la redacción del mismo es bastante ambigua y se limita a reflejar el compromiso de "ordenar e poñer en valor o frente marítimo de A Seara mellorando a accesibilidade da zona".

Los representantes de ambos grupos indicaron a la salida de la reunión que la fusión de los dos programas es total en esos más de 40 puntos, por lo que las miradas se dirigen ahora al reparto de áreas.

Este era el asunto más espinoso de la reunión de ayer y la cita se cerró, tras dos horas de conversaciones, sin un acuerdo. De hecho, ambas formaciones se volverán a reunir esta tarde, cambiando de nuevo la sede del BNG por la del PSOE. Antes de la que será la tercera mesa de negociación, tanto nacionalistas como socialistas reunirán a sus respectivas ejecutivas u órganos de gobierno local para tratar de forma individual sobre el reparto de áreas. El objetivo es que en la reunión posterior cada parte tenga claras qué líneas rojas pone en materia de reparto de responsabilidades de gobierno.

Ambas formaciones convocarán también a sus militantes a una asamblea este viernes, si la mesa negociadora cierra un pacto. El PSOE ya tiene fijada para las 21.00 horas del viernes dicha asamblea y el BNG la convocará en cuanto se cierre un acuerdo si este se alcanza. El contenido del pacto se someterá por lo tanto a la votación de la militancia en ambos casos, antes de darlo por cerrado de cara a la sesión de investidura del sábado.

Desde el BNG el responsable local de la formación, Daniel Rodas, aseguró que seguirán negociando "con cordialidade" y desde el PSOE, el exedil José Luis Leite, indicó que hasta la asamblea del viernes por la noche "hai tempo para acadar un acordo".

Además de Rodas, por parte del BNG se sientan a la mesa de negociación la alcaldesa en funciones, Leticia Santos; y los concejales en funciones Aldán Santamarina y Odilo Barreiro. Desde el PSOE los encargados de cerrar el pacto más allá de Leite son el edil Carlos Juncal; el futuro concejal Rodrigo Currás y María del Carmen del Río, que fue número 6 de la candidatura socialista.

El hecho de que ambas formaciones acordasen una declaración conjunta tras la reunión de ayer aventura un buen rumbo en las negociaciones, que antes de empezar se preveían duras y desde el PSOE se aludía incluso a la posibilidad de buscar un acuerdo con el PP.

Todo apunta a que la gestión de áreas tan importantes para un ayuntamiento como Urbanismo o incluso Cultura puede estar en la raíz de la falta de acuerdo sobre el reparto de responsabilidades y serán el principal escollo a salvar en la cita de esta tarde.

El programa conjunto de gobierno incluye compromisos como desarrollar los terrenos para el centro de salud, construir una área para deportes alternativos y una nueva biblioteca, gestionar nuevos viales para descongestionar el centro urbano o una nueva escuela infantil para niños de 0 a 3 años, pues Moaña solo cuenta con la de Quintela de titularidad pública y son decenas las familias que se quedan sin plaza cada año.