Con la ayuda de los profesores José Ramón Durán, Lucía Costa y Eva Gabriel, los alumnos de Infantil y de 1º de Primaria del colegio CEIP A Guía de Moaña, han convertido una de las aulas del centro en un museo de dinosaurios, llamado Dinomuseo, que además es visitable, con dos pases al día a las 09:15 y a las 12:15 horas, con cita previa y hasta final de curso. En el museo, para el que hay incluso elaborada una taquilla en la que los alumnos venden entradas con dinero de papel, se puede ver todo el trabajo desarrollado a lo largo del curso sobre estos animales prehistóricos, que eligieron como tema después de ver una exposición de dinosaurios en Pontevedra. "Siempre buscamos un tema que les guste y trabajamos las áreas de movilidad y de trabajo en equipo", señala José Ramón Durán.

El trabajo fue interesando y complicándose, ya que los niños quisieron construir un esqueleto de dinosaurio como los que hay en los museos. Y se hizo un T-Rex de 2,5 metros de alto y 3 de largo en polispán forrado de cola y papel. Se hizo un arenero en donde trabajaron como paleontólogos en busca de huesos. Después surgió la pregunta ¿y dónde lo metemos? y la respuesta de hacer un museo en un aula libre. Los escolares elaboraron fósiles con masa de sal y con el reciclaje de botellas de plástico construyeron otro dinosaurio, un Diplodocus, con lo que también trabajaron el cuidado del medio ambiente y la reutilización de residuos. Surgió después un tercer animal, un Pteranodón aunque de menor tamaño, que está colgado del techo. En el museo hay murales con información de los dinosaurios, un acuario con los que eran marinos, un nido con huevos hechos por los niños, dos dinos con carros de la compra para analizar la pirámide alimenticia, un puzzle para trabajar la partes del animal y una caja con auriculares para saber el sonido de estos animales que suenan al otro lado de la ría y que hacen la competencia al famoso Dinoseto de Vigo.