Esperando ver lo que deja la marea se encontró un vecino de Cangas con un congrio muerto de unos 30 kilogramos. El final del pez estaba en sitio de desechos de despieces de la plaza de abastos, según conocimos después. Tampoco hace mucho que en Rodeira se encontró una morena, que también pesaba lo suyo. Vamos, que Rodeira no es el sitio a donde van a varar las ballenas, pero llegan grandes animales a la orilla. Y no va con segundas.

Las reservas espirituales

Antes era la Diputación de Pontevedra, ahora parece que es la Zona Franca. Siempre habrá un roto para un descosido. Ya me entenderán.