¿Y por qué la empresa de plataformas elevadoras Rama, con plantas en Sanguiñeda (Mos) y Bergondo (A Coruña) y que forma parte del Grupo gallego Meifus, eligió el club de remo de Tirán para celebrar su Día de la Familia? La respuesta está en su responsable de marketing y control de gestión, el moañés Lino Portela Cordeiro, veterano del club moañés para el que gestionó un patrocinio en su empresa como también para Discamino, el colectivo que ayuda a realizar el Camino de Santiago a las personas con discapacidad y que se unieron en esta celebración que transcurrió en las instalaciones del club y que reunió a unas 120 personas -entre trabajadores (50) y familiares- en este Día de la Familia. Entre los presentes había caras conocidas como la de la escritora Ledicia Costas, muy vinculada a la empresa, en donde empezó a trabajar, como lo hacía su padre hasta su reciente jubilación y en donde siguen su hermana y su pareja. También se encontraba el poeta local Daniel Costas con su hija y como miembro de Discamino, colectivo con el que Lino Portela empezó a tener contacto a través de su amigo y vecino de Moaña, Suso Valverde.
Lino Portela reconoce que cuando su jefe le planteó hace cuatro años organizar este tipo de reuniones de los trabajadores con sus familias, no creía mucho en la idea, por el trabajo que suponía y porque no tenía claro sus beneficios, pero ahora asegura que tiene que darle la razón: "Merece la pena. Se juntan a las familias con la empresa y también los propios compañeros, muchos de los cuales no incluso no sabían sus nombres antes de estas reuniones".
La jornada, que se celebró el sábado, transcurrió durante todo el día y hasta las ocho de la tarde, en el club de remo, en donde los veteranos de Tirán les ofrecieron una masterclass de remo en el foso y también salieron al mar con una trainera. Por parte de Discamino se trasladaron tres de las bicicletas adaptadas que utilizan para las rutas, que probaron en una actividad que también fue de inclusión. Los veteranos del remo ayudaron a cocinar un churrasco en el exterior de las instalaciones que luego comieron todos dentro del club. Ya por la tarde en el salón noble o sala de banderas de Tirán difrutaron con juegos virtuales que ofreció la empresa Inmersia. La jornada concluyó en el puerto deportivo con actividades a cargo de la empresa Tierra y Mar.
