"O servizo [de Axuda no Fogar] estase a prestar axustándose ás condicións do contrato asinado en data de 30 a agosto de 2017". Es la conclusión del informe realizado por técnicos del Concello de Cangas evaluando el servicio que presta la empresa Idades S.L. desde 2014 y que había generado críticas "anónimas" que no se han ratificado oficialmente, como también destaca el documento. El contrato finalizará en 2020 y, aunque no se detecta irregularidad alguna, el concejal de Servizos Sociais, Tomás Hermelo, propone no hacer uso de las prórrogas previstas y licitar de nuevo el servicio, una tarea que ya deberá afrontar la próxima corporación municipal.

En la auditoría interna encaminada a detectar fallos en el servicio de Axuda no Fogar (SAF) no aparece nada fuera de lo normal, ni en los libros de reclamaciones de la empresa adjudicataria ni en el de la Consellería de Política Social aparecen denuncias. Sí salió a la luz una queja anónima de hace un año, de la que no hay registro formal y cuyos argumentos no se confirman en la práctica. Los técnicos corroboran que se realizan "reunións de seguimento dos expedientes" con periodicidad semanal y que la empresa "está a cumprir no caso das axudas complementarias". Con respecto a la presentación mensual de las facturas correspondientes al servicio prestado, "constátase que en determinados meses sofre lixeiros retrasos", aunque tampoco se advierten deficiencias de calado.

El programa de Axuda no Fogar se presta por acuerdos entre la empresa adjudicataria, el Concello y las personas usuarias, y se hace efectivo "en calquera día da semana, de lunes a domingo" e incluidos los festivos. El informe firmado por el director del Centro Municipal de Benestar Social (CMBS) y por una trabajadora social del departamento también señala, con respecto al personal la empresa Idades S.L. , que "estase a cumprir coa ratio esixida no contrato", y la formación del personal de ayuda en el hogar "cumpre os requisitos do decreto que a regula", por lo que descarta esas supuestas irregularidades.

Entre las quejas que se habían lanzado al margen de los cauces oficiales figuraban las de que la empresa contrata a personas que carecen de las habilidades propias para este trabajo de cuidado de ancianos y que los fines de semana y los festivos no hay ningún tipo de servicio para familias que dependen del programa que desarrolla el Concello de Cangas y que sufraga conjuntamente con la Xunta. También se aseguraba que las personas que tienen a su cargo dependientes firman el informe de seguimiento porque tienen miedo, e incluso se hablaba de que existía un grupo de WhatsApp formado por trabajadoras del servicio que ventilaban las miserias de los usuarios.

"O programa de axuda no fogar do Concello de Cangas conta cun libro de reclamacións visado pola Consellería de Política Social no que deben figurar todas as reclamacións presentadas" y de la que reciben copia los servicios de inspección, aunque, en el período del actual contrato "non se ten presentado ningunha reclamación a través deste medio", aseguran. La empresa Idades S.L. está sometida a control e inspección de Servizos Sociais Comunitarios e Inclusión Social de la Xunta.