La Federación de Pontevedra solicitó que para la próxima campaña se fijase un tope de capturas lineal de 50 kilos por tripulante enrolado y a bordo y otros 50 por barco. Esta propuesta finalmente no saldrá adelante porque no contó con el apoyo de las federaciones de A Coruña y Lugo. De este modo se mantendrá el sistema actual: una cuota de 30 kilos para los meses de julio y agosto y 50 kilos entre septiembre y mayo. La consellería sí que accedió a la petición de levantar la obligación de que las boyas de los aparejos llevasen una identificación electrónica, un requisito que solo se exigía a la nasa pulpo. Eso no significa que no estén identificadas puesto que deben llevar un identificativo con el folio y nombre del barco. "Era un sistema que non tivo a eficacia que se agardaba e a Xunta traballa noutro tipo de verificación máis efectiva, que cando esté lista aplícarase a todas as artes de pesca", afirma José Manuel Rosas.