Más de 13 meses han pasado desde que el Concello de Moaña remitiese a Portos de Galicia su proyecto para finalizar, con cargo al Plan Concellos, el paseo marítimo de Domaio. Por fin, ayer hubo buenas noticias en esta obra y el organismo autonómico remitió al Concello el convenio a través del que se compromete a dar el permiso para obrar en unos terrenos de su propiedad. Después de meses de trifulca política y de que el Concello denunciase un bloqueo partidista del convenio, Portos de Galicia aceptó finalmente el último proyecto municipal que incluye el añadido para conectar en seguridad el final del paseo con las aceras que bajan al muelle de la parroquia desde la carretera general PO-551.

El presidente de Portos, José Juan Durán, adelantó este visto bueno la tarde del miércoles a representantes de la Asociación de Veciños O Monte Faro. Y es que este colectivo jugó un papel esencial en que el acuerdo entre ambas administraciones llegase a buen puerto, reuniéndose en distintas ocasiones con ambas para evitar que se pierda una inversión para la parroquia de 100.000 euros, que busca acabar, con esta tercera fase, un paseo marítimo que Portos había prometido hacía una década, pero que nunca se llegó a ejecutar. Después de que los colectivos la priorizasen en el consello veciñal de Domaio, el bipartito decidió acometerla directamente.

La alcaldesa, Leticia Santos, anunció ayer la firma inminente del convenio, que se remitirá a Portos para que Durán plasme también su visto bueno. "Comezaremos de inmediato coa licitación para que o paseo estea en obras este mesmo ano", promete la regidora. El convenio de colaboración tendrá una duración de 15 años con la opción de una prórroga de otros cinco años. Autoriza al Concello a ejecutar el proyecto firmado por los técnicos inicialmente, así como la solución para el entronque que reduzca la peligrosidad de la salida de los peatones por el acceso al muelle. Este era precisamente el argumento esgrimido por Portos durante meses para no firmar previamente el convenio. La batalla política por este asunto había llegado incluso al Parlamento gallego, y contó con una visita del propio Durán a la parroquia de Domaio.

El Concello quedará comprometido, además de a financiar la totalidad de la obra, a encargarse de la conservación, reparación, mantenimiento, limpieza y reposiciones de las obras. Se creará una comisión para comprobar el cumplimiento del acuerdo.

Sobre la petición de un "proyecto técnico y no un boceto" que esgrimía Portos en las últimas semanas, la alcaldesa asegura que solo se remitió a mayores, en distintos formatos, los planos de la última fase del paseo con el entronque con las aceras, firmado por el arquitecto municipal. Tras mostrarse feliz de que finalmente se resuelva la situación y Moaña no pierda la inversión comprometida por la Diputación, Santos asegura que "Portos recapacitou e deixou o bloqueo político, porque o Concello enviou toda a documentación que se solicitou".

Tras la adjudicación las obras entre el local de jubilados y el muelle de bateeiros se deberán ejecutar en unos cuatro meses.