"Kily", la perra de 13 años que el martes fue encontrada deambulando por Aldán en muy malas condiciones higiénico sanitarias, ha sido finalmente cedida por su dueño a la Protectora de Animales de O Morrazo que lucha por salvarle la vida en una clínica veterinaria en Moaña. La perra tiene fallo renal, carece de apetito y prácticamente no tiene fuerzas y la prueba de biopsia determinará, en el caso de que puedan estabilizarla, si la causa de su infección es tumoral o no.

Responsables de la Protectora la sacaron hoy un poco a la calle para que diera un paseito, pero solo da unos pasitos y se tumba porque tiene muy pocas fuerzas.

"Kily" permanece desde el martes ingresada en la clínica veterinaria después de que fuera rescatada por un agente de la Guardia Civil deambulando en pésimas condiciones en pésimas por la parroquia de Aldán, en Cangas. Según explican desde el cuerpo de la Guardia Civil, este agente circulaba en su vehículo particular cuando observó a otra conductora que se había detenido para auxiliar al animal que caminaba con dificultad por la calle. Entre los dos pudieron comprobar que además de presentar unas deplorables condiciones higiénicas, tenía el cuerpo recubierto de heridas, sobre todo en la boca.

Con la ayuda de la Protectora de Animais do Morrazo se le prestaron los primeros auxilios y a través del microchip se pudo localizar al propietario de la perra, que resultó ser un vecino de la misma parroquia. La perra presentaba un grave estado de deshidratación y desnutrición.

El dueño del can, que aparentemente tenía conocimiento de sus heridas y las condiciones en las que se encontraba, fue denunciado ante la Consellería de Medio Ambiente como supuesto autor de una infracción grave tipificada en la Ley de Bienestar Animal de Galicia. El propietario es una persona de edad avanzada que también pasa por una enfermedad, aunque para la Protectora no es justificación para tener a un animal en estas condiciones.

La Protectora do Morrazo ya aseguraba ayer que iba a luchar para que la perra no fuera devuelta a su dueño, como era intención del Seprona, y hoy confirmó que el dueño firmó al final la cesión voluntaria del animal asumiendo los gastos de la clínica veterinaria. En el caso de logren salvarle la vida, van a buscarle una casa de acogida, como suelen hacer con animales enfermos, "con todos los cuidados que merece".