La fuente cibernética de la Praza Massó no gana para sustos. Apenas lleva un año en funcionamiento y ya ha sufrido tres accidentes serios. El último este mismo fin de semana y todos de la misma manera: un automóvil que sale de este recinto pasa por encima de la superficie del sistema sin percatarse de la diferencia de pavimento y acaba encastrado en el foso. Unos sucesos que incluso llegaron a protagonizar las letrillas de las comparsas de Bueu durante el último carnaval.

En el incidente del Viernes Santo se vio implicado un turismo, que venía de decargar material en la carpa instalada en la Praza Massó para la fiesta de "Bueu Gozosos Anos 30".A la hora de abandonar la plaza el conductor no se dio cuenta de la zona que ocupa la fuente cibernética, que tiene un pavimento distinto al del resto de la plaza y que no está preparado para soportar el peso de un automóvil. En las dos ocasiones anteriores los vehículos implicados fueron sendos camiones, que venían de recoger material de los actos relacionados con el Día das Letras Galegas y el Día Mundial del Alzheimer.

La repetición de este tipo de accidentes obliga al Concello de Bueu a buscar una solución que sirva para proteger de manera eficaz la fuente. Inicialmente el consistorio era reacio a colocar pivotes porque constituyen una barrera en un espacio de ocio y disfrute, pero ahora se plantea recurrir a esta opción.