La doctora en Biología Tamara Sotelo es una de las caras nuevas en las listas electorales en los próximos comicios municipales en Bueu. Su investigación en la Misión Biológica de Galicia (MGB, dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas) sobre la relación entre las verduras brásicas y una serie de genes beneficiosos para la salud recibió un sobresaliente "cum laude" y fue premiada por la Diputación de Pontevedra como uno de los mejores trabajos de investigación de 2015. Ahora será la número 6 dentro de la lista del BNG de Bueu.

- Creo que el alcalde le echó el ojo, si me permite la expresión, en una audiencia que solicitó con él para presentar un algún tipo de queja o mejora. ¿Alguna vez se imaginó que aquella audiencia terminaría con una propuesta para entrar en la política municipal?

-Fue exactamente así. Conocí al alcalde en una reunión que solicité con él para exponer ciertas quejas y dudas, así como sugerencias para el ayuntamiento. Jamás pensé que a raíz de esa reunión se acabaría abriendo un nuevo proyecto en mi vida.

- ¿ Qué le decidió a aceptar la propuesta de Félix Juncal y el BNG?

-No creo que fuera algo concreto lo que me hizo aceptar la propuesta de unirme al grupo, sino que después de varias reuniones y de meditarlo, Félix Juncal me hizo ver que la mejor manera de mejorar el pueblo es involucrándose en ello.

- ¿Y qué cree usted que puede aportar?

-No sé exactamente lo que puedo llegar a aportar, sinceramente. En mi caso, intentaré hacerlo lo mejor que sepa, ponerle ganas e ilusión por hacer lo mejor para el pueblo. Pero creo que ese es el objetivo de todo el equipo ya que es un grupo muy formado y con ganas de luchar por Bueu.

- ¿Cuál es el diagnóstico que hace de la situación actual de Bueu: qué se ha hecho bien y en qué se puede mejorar?

-Creo que me pone en un compromiso, ya que obviamente el pueblo no está como a todos nos gustaría, de ahí mi reunión con el alcalde. Pero también soy consciente de las limitaciones de un ayuntamiento pequeño, además la burocracia y la política no funcionan tan rápido como a todos nos gustaría y conseguir algo requiere un esfuerzo altísimo.

- Usted es una investigadora premiada y en 2016 decía en una entrevista a FARO que llevaba un año sin trabajo y pensando en irse al extranjero. ¿Cuál es su situación actual?

-Es cierto, pensaba en irme al extranjero, sabía perfectamente que si me iba no regresaría tan fácilmente, es una decisión demasiado importante. Al final la tierra llama, la familia llama y decidí emprender un camino diferente a la investigación, al menos momentáneamente. Ahora mismo soy autónoma, madre y opositora.

- La política local se queda lejos de las competencias para mejorar las condiciones de los investigadores, pero este mismo mes hay elecciones generales. ¿Cuáles son las propuestas que deberían llevar los partidos en sus programas?

-Es muy difícil de gestionar, lo sé, pero tanto el gobierno como la sociedad deberían entender que un maestro, un doctor o un investigador trabajan sobre todo para el pueblo: para que nuestro futuro sea mejor, ya sea en las aulas o a nivel de salud. En España los investigadores se sienten infravalorados, cosa que en otros países no ocurre, y ese creo que debería ser el principal cambio en todos nosotros.

- ¿Qué cree que será más difícil: la investigación genética o lidiar en el mundo de la política local?

-Ahí me lo pone bastante fácil, creo que me va a resultar más difícil la política. Sin duda alguna.