La Consellería de Medio Ambiente y el Parque Nacional Illas Atlánticas aseguran que en estos momentos se está realizando un estudio técnico para intentar determinar la carga máxima que puede soportar la isla, tomando en consideración el impacto sobre el medio natural y el aprovechamiento de recursos como el agua. Con esas conclusiones se decidirá qué hacer, ante lo que a priori existen dos alternativas: habilitar algún cupo a mayores o bien dejar la situación como está. Esa segunda opción significaría que las personas que se hospeden en este tipo de alojamientos formarían parte del número máximo de 1.300 visitas diarias autorizadas.